De los 36 mil inscritos en la carrera, 38 eran chilenos, el doble de los nacionales en la edición de 2013.
El mejor fue Pablo González (en la foto), profesor de educación física, de 37 años y que remató 435º. "La carrera estuvo muy bien organizada. Mucha policía, se nota que tomaron muchas medidas de seguridad y mucha, pero mucha gente en la calle", relata.
En lo deportivo, el debutante en Boston, pero con experiencia en el Maratón de Nueva York, asegura que a su equipo, Road Runners, "le fue espectacular, todos están felices con sus marcas".
Otro nacional, Pablo Contreras, del Brain Team, cuenta que "la carrera estuvo linda, como siempre, con un plan de seguridad tremendo. Este es el maratón más importante, las calles están llenas de familias alentando. Para Boston esta carrera es una marca registrada, por eso es tan importante que la población se sienta segura".