Pese a que el nuevo evento de marea roja detectado esta semana en el sector Yelcho, en la comuna de Quellón, Chiloé, está circunscrito a un área pequeña y marginal en la producción de choritos, existe preocupación en la isla por una eventual expansión del fenómeno. "Hay que estar muy atentos e implementar todas las medidas de control. Efectivamente, hay un riesgo de que se pueda expandir", explicó Fernando Mardones, doctor en epidemiología veterinaria de la U. Andrés Bello.

Y agregó "no debiésemos esperar la magnitud ni la extensión espacial de lo que pasó el año pasado, por las condiciones climáticas actuales, pero podría aumentar hacia la zona sur de Chiloé o bien mantenerse hasta reducirse. Es un tema de cuidado".

En el caso de Yelcho, la Seremi de Salud cerró el sector, el pasado 11 de enero, al detectar niveles por sobre la norma de toxina amnésica , uno de los tres tipos de marea roja que existen (ver recuadro). Inevitablemente, este hecho trajo a la memoria el masivo fenómeno que afectó a prácticamente toda la Región de Los Lagos el verano pasado, que comenzó en febrero, y que generó una fuerte crisis social.

"Esperamos que, de acuerdo a las condiciones climáticas, el fenómeno no aumente, porque si no va afectar zonas donde sí tendríamos el problema que tuvimos hace un año, que fue complicadísimo", advirtió el alcalde de Quellón, Cristián Ojeda.

Por ahora, en la zona cerrada por marea roja sólo existe un cultivo de choritos, que no puede comercializar sus productos, "pero en una cantidad muy marginal comparado con la producción total de choritos que no tiene problema en la isla", precisó el edil. Según informó Sernapesca, este cultivo es de un particular con una decena de trabajadores afectados, quienes pueden laborar en otras zonas abiertas.

En cuanto a la pesca artesanal, en la práctica ésta no se vería afectada, porque en Yelcho no hay bancos importantes que explotar. "Lo único que nos puede afectar es que la gente sobrerreaccione y se haga un problema de algo que está totalmente controlado. Los rumores causan daño. Se cerró Yelcho específicamente como prevención, pero todos los productos que salen de Quellón, y que abastecen a todo el país, están debidamente certificados y muestreados por Salud", indicó Marco Antonio Salas, presidente de los pescadores artesanales de Quellón.

Medidas sanitarias

Se informó que el cierre de esta zona busca evitar que recolectores de playa o visitante saquen mariscos y se enfermen. "En Quellón estamos acostumbrados a tener marea roja en verano, hay que aprender a convivir con ella. Por eso, recomendamos siempre comprar en lugares autorizados, que certifican la sanidad de los productos", dijo Salas.

El presidente de la Cámara de Comercio y Turismo de Castro, Julio Candia, descartó en la isla una baja interna en la venta de productos del mar. "Las ventas están normales y, además, nos preocupamos de informar y educar a los turistas para que sólo consuman en lugares autorizados. En Chiloé ya aprendimos bien la lección con lo que pasó el verano pasado", señaló.

En Puerto Montt, Rosa González, presidenta del Mercado de Angelmó, coincidió en que el brote de marea roja no ha tenido impacto, "ya que no hemos notado bajas en la afluencia de público".

En el Terminal Pesquero de Santiago, Metropolitano, Jéssica Valderrama, de la pescadería Renacer, comentó que "si bien nos abastecemos de las zonas afectadas, hay muchos otros lugares de donde traer productos, así que no nos ha afectado. El verano pasado sí que tuvimos una gran disminución de ventas".