El primer metro de China con tecnología de absorción de ruidos, que le permite circular silenciosamente, fue inaugurado ayer en Pekín, una línea que además permitirá por primera vez llegar al Palacio de Verano en suburbano.

El nuevo metro circulará en la línea 4, inaugurada también ayer, que va del norte al sur de la ciudad en su parte occidental y también unirá con este transporte por primera vez el zoológico, la Biblioteca Nacional, la zona tecnológica de Zhongguancun o la Universidad de Pekín, entre otros lugares destacados de la capital.

La tecnología "silenciosa" se implantará a partir de ahora en todas las nuevas líneas que están construyéndose en la ciudad, destacó hoy la agencia Xinhua.

La línea 4 ha costado US$2.250 millones, sufragados en un 70% por el Ayuntamiento de la capital, mientras que el 30% ha sido invertido por la empresa que gestiona el metro de la ciudad de Hong Kong (MTR).

Se espera que la nueva línea ayude a descongestionar zonas de frecuentes atascos, como la mencionada avenida de Zhongguancun, y que ahorre un tiempo considerable a los viajeros, ya que los 28 kilómetros que hay entre sus dos extremos se cubrirán en 48 minutos, frente a las dos horas que se tarda habitualmente en automóvil.

Con la inaugurada hoy, y el gran despliegue de nuevas líneas el año pasado con motivo de los JJOO, la capital china tiene ya nueve líneas en funcionamiento, frente a las dos que tenía hace una década.

La ciudad proyecta construir otras 10 líneas antes de 2015 (y ampliar las ya existentes) para que la red pase de los 226 kilómetros actuales a 561, lo que convertiría su metro en uno de los mayores del mundo en cuanto a extensión.