China efectúa los preparativos preliminares para llevar una misión tripulada a la Luna, reveló en un foro sobre astronáutica el subdirector del programa de vuelos tripulados, Yang Liwei, citado hoy por la agencia oficial Xinhua.
El proyecto obtendrá en breve la aprobación inicial del Gobierno y la financiación necesaria, subrayó Yang, quien en 2003 se convirtió en el primer astronauta chino que viajó al espacio.
La misión supondría la culminación de los dos grandes programas actuales del programa espacial chino, que son las misiones tripuladas "Shenzhou" y las sondas lunares "Chang E".
Con las misiones "Shenzhou", cuyo gran objetivo es el establecimiento de una estación espacial permanente, han viajado ya al espacio nueve hombres y siete mujeres de China. La próxima, el Shenzhou 12, viajará al espacio en 2018.
En cuanto a las sondas lunares, China ya ha enviado tres (la última, en 2013, fue la primera que alunizó) y en 2017 y 2018 mandará las dos siguientes, una de ellas con destino, por primera vez en la historia de la carrera espacial, a la cara oculta de la Luna.
Preguntado Yang sobre si sería él uno de los primeros astronautas chinos en pisar la Luna, se mostró ilusionado. "Si me dan la oportunidad, ¡ningún problema!", dijo a los periodistas el cosmonauta, de 51 años.
Además, China también reveló el lugar donde intentará alunizar este año.
La sonda lunar Chang E 5, que será lanzada en noviembre, intentará alunizar en Mons Rumker, una zona situada en el cuadrante noroeste de la cara visible de la Luna, reveló el director de este programa espacial, Liu Jizhong.
Mons Rumker es una zona volcánica aislada y relativamente cercana al Mare Imbrium, el lugar donde alunizó en 2013 la anterior misión china, el Chang E 3, que fue la primera de China que logró llegar a la superficie del satélite terrestre.
Liu, que participa esta semana en una conferencia internacional sobre exploración espacial en Pekín, señaló que el programa lunar que dirige tiene especial interés en explorar el polo sur de la Luna, donde "la búsqueda de agua y la sombra permanente pueden producir grandes descubrimientos científicos".
Ese área polar puede ser el asentamiento de una futura estación científica permanente y más adelante de una "aldea lunar" habitada, subrayó el experto, quien animó a los directores de agencias espaciales de todo el mundo presentes en la conferencia a unirse a estos proyectos.