Pasó a fines de mayo. Yantai Changyu Pioneer Wine, la mayor firma china del rubro, adquirió el 85% del brazo vitivinícola del grupo Bethia, en una operación valorizada en US$ 48 millones. Transacciones como estas seguirán repitiéndose, porque los chinos andan de compras por estos lados. "Hay muchas empresas chinas buscando oportunidades", subraya el presidente de la Cámara Chileno-China de Comercio, Industria y Turismo (CHICIT), Juan Esteban Musalem.
En los próximos meses se instalará una sucursal de Bank of China, uno de los cuatro bancos más grandes de ese país. La compañía, a fines de junio de 2016 presentó a la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (SBIF) la solicitud para operar una licencia bancaria y hoy ese trámite está en la última fase de aprobación, quedando sólo la autorización de funcionamiento, cuentan en la repartición.
Su llegada se uniría al arribo que el año pasado hizo el Banco Chino de la Construcción (BChC) -el segundo operador en la nación asiática- y también se sumaría al análisis que está haciendo una tercera institución del sector, cuenta Musalem. En la industria se especula que se trataría del China Development Bank.
Todos ellos abrirán aún más las puertas para materializar nuevas inversiones en el país. "Esto muestra que tendremos muchísimas empresas del país asiático establecidas en Chile", subraya Musalem.
"Cuando un banco se establece, los clientes de ese banco en China encuentran apoyo, porque es alguien que entiende el idioma, las normas sanitarias, de impuestos, contables y laborales del país. Por lo tanto, se encuentran como en su casa y eso hace que la relación vaya creciendo", comenta Francisco Silva, presidente del Consejo Bilateral de Negocios Chile-China.
* Interés en energía
El atractivo chileno para los inversionistas chinos también abarca al rubro eléctrico, donde habrá novedades prontamente.
"Hemos estado muy activos", destaca Nelson Muñoz, Principal Advisor de China Three Gorges, dueña de la mayor hidroeléctrica del mundo: Tres Gargantas (22.500 MW). Adelanta que están buscando instalarse durante la segunda mitad del año. "Es muy probable que el encargado de Negocios en América Latina se traslade a Chile", dice en relación al ejecutivo que hoy está en Ecuador.
La idea del grupo, precisa, es monitorear desde acá el crecimiento en Ecuador, Brasil, Perú, Chile, Bolivia y también Argentina, donde viajará en las próximas semanas.
"Se creó una división inferior enfocada en desarrollar proyectos menores a 500 MW vinculados con energía renovable. Es el objetivo principal, junto con desarrollar infraestructura hidráulica", acota.
La compañía también ha estado mirando la oferta que ofrece el sector. "Hoy, hay 16.000 MW en proyectos de energía renovable. Hay harto dónde mirar", afirma.
Su llegada se unirá a la incursión que abrió en Chile la eléctrica State Power Investment Corp o Spic, compañía que adquirió los activos de Pacific Hydro. "Esta es la primera experiencia de Spic en países de la Ocde, Chile y Australia. Por tanto, están muy abiertos a aprender de nuevos mercados y la forma de generar energía en Occidente. Pacific Hydro es un buen complemento para ellos, por su experiencia en energía renovable", explica José Antonio Valdés, presidente ejecutivo de Pacific Hydro.
Esta semana se conoció el interés de Spic en comprar los activos eléctricos de Latin America Power (LAP) en el mercado chileno, transacción que podría involucrar unos US$ 400 millones. Se trata de operaciones de energía eólica e hidroeléctrica en Chile y Perú.
El sector sigue estando en el radar de las empresas asiáticas. "Últimamente, están muy interesadas en energía, porque tienen tecnología barata, son competitivos y los retornos les resultan atractivos", asevera Sergio Diez, del estudio Cariola Diez Pérez-Cotapos.
Pero aclara que no todas las gestiones terminan en negocios: "En la mayoría de las operaciones que participamos con empresas o inversionistas chinos, el resultado no ha sido exitoso para ellos".
* Vitrineando otras opciones
Los empresarios del gigante asiático, en todo caso, tienen intereses variados en los negocios. En Carey reconocen que están asesorando a algunas firmas interesadas en adquirir otras viñas, además de la operación conocida a inicios de la semana pasada con Bethwine. "No podemos contar mucho, pero estamos asesorando unas parecidas", dice Alberto Cardemil, socio a cargo de China en Carey.
Musalem apunta que en el último tiempo han detectado gran interés en la búsqueda de oportunidades en los sectores de turismo, infraestructura y agronegocios. Y añade como "bastante probable que a futuro se verifique una importante participación de empresas chinas en procesos de licitaciones públicas de megaproyectos de integración regional, como los corredores bioceánicos".
Confirma que China Railway Group (CREC) abrió una sucursal en Chile y que hace unos días cerró un acuerdo con Sigdo Koppers (SK) para desarrollar proyectos de infraestructura en el país y en Latinoamérica. En particular, "para la modernización de sistemas ferroviarios, nuevas líneas de Metro y túneles", acotan en la chilena SK.
* Litio, sector estratégico
Las firmas chinas siguen interesadas en el litio nacional. Hace unas semanas se supo que GSR Capital nuevamente está intentando entrar a las empresas ligadas a SQM.
Eduardo Bitran, vicepresidente ejecutivo de Corfo, relata que en los últimos dos años se ha reunido con cinco empresas chinas que lo han solicitado a través del portal de Transparencia de la repartición.
"Aquellas interesadas en el fracasado proceso de venta de acciones de SQM han hecho consultas sobre el conflicto arbitral de SQM y Corfo y sobre el contrato con nosotros. Aquellas interesadas en agregar valor al litio han consultado sobre los detalles del contrato entre Corfo y Albermarle. Hay mucho interés en el litio y Chile es la estrella mundial en esta industria", detalla Bitran.
En mayo pasado, el consorcio chino y coreano Industria Nacional del Litio (Inadel), donde también está Hyundai entre sus socios, se reunió con el subsecretario de Minería, Erich Schnake, para informar sobre el proyecto que quieren impulsar en los terrenos que la Universidad de Chile posee en Laguna Carén, comuna de Pudahuel.
Su idea es desarrollar toda una cadena de valor para el litio, desde su extracción hasta la fabricación de partes de automóviles eléctricos. La iniciativa comprende una inversión inicial de US$ 2.000 millones por cada 20.000 toneladas de litio metálico equivalente disponible.
* El despertar del gigante
Hoy, China es el principal socio comercial de Chile. Sin embargo, esa importancia no se refleja en la inversión. El stock de inversión china en el país entre 2009 y 2015 alcanzó US$ 260 millones, según datos del Banco Central. Un monto que contrasta con el intercambio comercial, que llegó a los US$ 31 mil millones en 2016.
"En comparación con el comercio bilateral, hoy las inversiones siguen en un nivel bajo. Pero es un proceso que comienza y que tiene como meta crecer varias veces, al considerar el propósito del Presidente Xi Jinping de que la inversión aumente a US$ 250.000 millones en los próximos 10 años", recalca la directora ejecutiva de la Fundación Chilena del Pacífico y organizadora del Apec CEO Summit 2019 en Chile, Loreto Leyton.
Silva enfatiza que el interés chino llegó para quedarse y que "crecerá y está para ofrecer oportunidades de negocios interesantes". Lo relevante, añade, es que Chile fue el primer país del Cono Sur que firmó un tratado de libre comercio con la nación asiática, en octubre de 2006. También fue el primero de la región en restablecer las relaciones diplomáticas y en reconocer su calidad de economía de mercado. Todo esto potencia las relaciones entre ambos países, recalca Silva: "Ellos no se olvidan de eso".
La simpatía, en todo caso, es mutua y, por eso, entre finales de agosto e inicios de septiembre próximos se llevará a cabo la tercera versión de Chile Week China 2017, que considera varias actividades en diversas ciudades, entre ellas Hong Kong.
El director de InvestChile, Carlos Álvarez, subraya que "las compañías chinas destacan las condiciones generales y ambiente de negocios que ofrece nuestro país y las adquisiciones o sociedades en proyectos o compañías que ya están instaladas y operando, como una forma de ingresar al mercado de manera más natural".
El personero afirma que están trabajando con mucha fuerza en el organismo en mejorar la brecha cultural de negocios: "Las empresas chinas quieren invertir acá y están haciendo el esfuerzo por comprender cómo se hacen los negocios, cómo participar en las licitaciones públicas y cómo operar desde nuestro país hacia el resto de la región".
* Crear relaciones, lo esencial
Los abogados que se han relacionado con inversionistas chinos coinciden en que la comprensión del idioma es un tema fundamental. Por eso, en Carey, por ejemplo, tienen un profesional experto en chino mandarín -Ignacio Tornero, cuyo nombre en chino es 罗焱 y se pronuncia Luo Yan-. Este abogado, de hecho, vive en la nación asiática desde hace ya dos años.
"Para ellos es importante crear guānxì, que es relación. La clave del éxito es entenderlos, ponerse en su lugar y tener paciencia", reflexiona Cardemil.
Francisco Ugarte, también de Carey, agrega que se realizan muchas reuniones en las que un punto clave es explicarles cómo funciona Chile, cómo se realizan los procesos. A su vez, los inversores chinos están preocupados en cuanto a cómo son vistos. "Por ejemplo, en las conversaciones entre Tianqi y la autoridad, preguntaban si hay problema en que exista un inversionista chino, si el Estado lo ve como una oportunidad o si le es indiferente", relata.
Para lograr un acercamiento con mayor éxito entre ambos mercados, en el gobierno hoy están desarrollando una oferta más concreta al momento de promover al país. "Esa es la manera en que ellos hacen negocios", refuerza Álvarez.
El director del organismo -que reemplazó al desaparecido Comité de Inversión Extranjera- indica que en esa tarea han estado trabajando con socios estratégicos, como la Embajada de China en Chile, la Cámara Chileno-China, el China Construction Bank y la embajada y oficina comercial en Beijing.
"Estamos construyendo una red con instituciones y ministerios chinos que nos permitirá, en el corto plazo, ser más efectivos a la hora de llegar hacia los empresarios chinos con nuestro mensaje: la inversión china es bienvenida en Chile", enfatiza Álvarez.