Un cohete "Gran Marcha" fue lanzado poco después de la medianoche del sábado desde el centro espacial en Xichang, en la provincia sudoccidental de Sichuan, en China.

El gigante asiático quiere independizarse en el futuro del Sistema de Posicionamiento Global (GPS) de Estados Unidos o del "Glonass" de Rusia.

El sistema de navegación satelital chino es una competencia directa del proyecto Galileo de la Agencia Espacial Europea (ESA), debido a que los chinos y los europeos reservaron la misma radiofrecuencia. Quien la utilice primero se quedará con ella.

Debido a que los chinos están adelantados a los europeos en el desarrollo de su sistema de navegación, en Bruselas se habla de "problemas graves".

Está previsto que "Beidou" comience a brindar servicios en Asia y la región del Pacífico a partir de 2012, indicó la agencia de noticias china Xinhua. Hasta 2020, treinta y cinco satélites formarán una red china que cubrirá todo el mundo.