El presidente chino, Xi Jinping, y su homóloga surcorana, Park Geun-hye, afirmaron hoy tras reunirse en Seúl que no permitirán la presencia de armas nucleares en la península coreana.
Xi y Park pidieron la reanudación de las conversaciones multilaterales con las que se intenta persuadir a Corea del Norte para que abandone su programa nuclear. Esas conversaciones a seis bandas se celebraron durante varios años y en ellas participaron Corea del Norte y del Sur, China, Japón, Estados Unidos y Rusia.
La visita a Seúl de Xi -el principal aliado de Corea del Norte- llega en un momento en que aumentaron las tensiones entre ambas partes de la península.
Después de amenazar en marzo con llevar a cabo un test nuclear, Pyongyang realizó decenas de pruebas con misiles en los últimos meses, incluido el lanzamiento este miércoles de dos misiles de corto alcance al mar del Este, también conocido como mar de Japón.
Se cree que con estas últimas pruebas el régimen comunista norcoreano ha querido mostrar su disconformidad con la visita de Xi a Corea del Sur.
Es la primera ocasión desde el restablecimiento de las relaciones entre Beijing y Seúl (en 1992) en la que un presidente chino visita Corea del Sur antes que Corea del Norte tras asumir el cargo.
Durante esta visita se espera que Xi y Park firmen acuerdos relacionados con un futuro acuerdo de libre comercio.