El conductor acusado de transportar a al menos 100 inmigrantes indocumentados dentro de un tráiler en condiciones sofocantes, 10 de los cuales murieron, dijo que no sabía que transportaba personas hasta que realizó una parada en Texas, mostraron el lunes documentos judiciales.
James Bradley Jr., de 60 años, dijo a los investigadores que se sorprendió cuando abrió las puertas del tráiler afuera de una tienda Walmart en San Antonio, y fue derribado por un grupo de personas que hablaba español que salió del camión, según una demanda penal presentada en el caso.
La versión atribuida a Bradley, quien podría enfrentar la pena de muerte si es hallado culpable, contradice lo informado por las autoridades, que sostienen que había una pequeña flota de vehículos utilitarios deportivos en el estacionamiento de Walmart para transportar a algunos de los inmigrantes que clamaban por salir del tráiler.
Bradley fue arrestado el domingo después de que la policía dijo que halló ocho personas muertas en la parte de atrás de su camión de carga, junto a otras 30 a 40 personas en torno al vehículo que sufrían de deshidratación e hipertermia. Todos eran inmigrantes indocumentados, la mayoría ciudadanos mexicanos, dijeron autoridades.
Otras dos personas fallecieron posteriormente, lo que elevó el total de muertos a 10, mientras que 29 permanecían hospitalizadas el lunes, según Thomas Homan, director interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos.
Las temperaturas durante en día en las horas previas a que el camión llegara a San Antonio habían superado los 37,8 grados centígrados.
Bradley se presentó brevemente ante una corte federal el lunes en San Antonio, donde fue acusado de un cargo de transportar a inmigrantes indocumentados -un delito por el que podría enfrentar la pena capital si es hallado culpable, debido a que el crimen resultó en la muerte de personas.
Originalmente más de 100 personas viajaban en el abarrotado tráiler, dijo Homan. Pero uno de los sobrevivientes declaró posteriormente a los investigadores que algunos lograron escapar del lugar antes de que llegara la policía y que fueron retirados por seis vehículos utilitarios negros que los esperaban en las cercanías.
El jefe de policía de San Antonio, William McManus, también dijo que imágenes de video muestran a varios vehículos que se acercan a recoger a las personas que estaban dentro del camión, a pesar de que Bradley, según los documentos judiciales revelados el lunes, negó haber visto tales automóviles.