Los expertos de la Universidad de Dundee, en conjunto con investigadores de la Universidad de Edimburgo, ambas instituciones en Escocia, desarrollaron un programa de computación llamado Vampire, que esperan ayudará a identificar las primeras señales de  la demencia senil en pacientes.
 
El programa permite analizar el ojo a través de imágenes de alta resolución en busca de modificaciones de venas oculares y arterias, vinculadas a la enfermedad, como también a otras complicaciones como la apoplejía y problemas cardiovasculares.
 
El proyecto de tres años, que costará unos dos millones de dólares, utilizará esa herramienta para identificar pacientes en riesgo.
 
El coordinador del proyecto y profesor del área de visión computacional de la Universidad de Dundee, Emanuele Trucco, afirmó que si se puede analizar el ojo de un paciente a partir de tecnologías no costosas y detectarse riesgos para la demencia "entonces la propuesta es muy interesante".
 
"Existe la promesa de una alerta temprana a partir de técnicas no invasoras y está también la posibilidad de que incluso utilicemos el mismo examen para diferenciar entre los distintos tipos de demencia", agregó.
 
Los investigadores compararán las medidas de arterias y venas oculares en miles de imágenes de alta definición, con historiales médicos de pacientes en el Hospital Ninewells de Dundee, para corroborar si existe una relación entre esos datos del ojo y la demencia senil.
 
"Cuando ocurren cambios en algunas partes del cuerpo, se pueden ver diferencias en los vasos retinales, por ejemplo en el ancho, algunos vasos se reducen en tamaño, otros se agrandan, existen diferencias en la tortuosidad, o en cuán retorcidos se vuelven esos vasos, también hay diferencias en los ángulos cuando los vasos se dividen en dos", subrayó Trucco.
 
De acuerdo al especialista, esas medidas "pueden revelar una gran cantidad de información"
 
"Pero tomarlas a mano puede ser una tarea muy laboriosa. El programa de computación Vampire permite a los científicos tomar estas medidas de manera repetida, confiable y eficiente, incluso cuando se trabaja con un gran número de imágenes de alta definición", continuó.
 
El Consejo de Investigación para Ciencias Físicas y de Ingeniería (EPSRC) financió el proyecto como parte de un programa de investigación valuado en 12,8 millones de dólares en once universidades de Gran Bretaña.
 
El profesor Philip Nelson, director ejecutivo del EPSRC, afirmó que el Reino Unido "enfrenta un enorme desafío en las próximas décadas como consecuencia de un rápido envejecimiento de la población y el creciente número de personas que sufren de demencia".
 
"Estos proyectos de investigación mejorarán nuestra habilidad para detectar y entender los diferentes tipos de demencia, y determinar cómo progresa esta enfermedad", concluyó.
 
De acuerdo a cifras de la organización Enfermedad de Alzheimer Internacional, al menos unos 44 millones de personas padecen hoy en día la enfermedad, cifra que se multiplicará por tres en menos de 40 años.
 
Para 2050 la entidad estima que serán 135 millones las personas que sufrirán este serio deterioro de las funciones mentales que afecta a la memoria, el lenguaje, la orientación y el juicio.