Dos científicos descartaron este viernes que el vertimiento de toneladas de salmones muertos en las costas del sur de Chile haya sido la causa de la marea roja que azotó recientemente esa zona del país y que provocó un impacto económico en la pesca y extracción de mariscos.
Los comentarios de los científicos se conocen en momentos que se aguardan las conclusiones de un informe de una comisión de expertos designados por el gobierno para estudiar cualquier vinculación entre los eventos.
Durante un seminario, el director del Laboratorio de Toxinas Marinas de la Universidad de Chile, Benjamín Suárez, y el biólogo marino Alejandro Clement dijeron que el fenómeno respondería a factores climáticos.
"Se generó un diagnóstico equivocado en un principio, que vinculó en forma directa que el vertimiento de los salmones era la causa de la marea roja, y eso generó espuma, pero hay que generar diagnósticos objetivos", dijo Clement citado en un comunicado.
La marea roja ha golpeado especialmente a la región de Los Lagos, incluida la turística Chiloé, para transformarse en el fenómeno de mayor extensión registrado en el área y que, según pescadores, habría sido agudizado por una crisis del salmón.
Ante la aparición de la marea roja, pescadores de la zona denunciaron que el fenómeno habría sido acelerado por la eliminación de los peces muertos en el océano .
Suárez comentó que una interrogante válida es si una situación de este tipo puede incidir en la intensidad, extensión o modulación por factores ambientales.
"Esta interrogante va a permitir que la industria (salmonera), que en estos momentos no es competitiva y que presenta serios problemas de financiamiento, que le impiden expandirse, tenga una posición de sostenibilidad integral", explicó.
La industria salmonera en Chile, la segunda mayor del mundo, fue sacudida este verano austral por un alza de las temperaturas -vinculada al fenómeno de "El Niño"- que causó el florecimiento masivo de algas dañinas en centros de cultivos en algunas zonas del sur, provocando mortandad y dejando millonarias pérdidas.
Esta crisis impactó en los precios internacionales del salmón y en el valor bursátil de una industria liderada por la unidad local de la noruega Marine Harvest, AquaChile , Blumar, Camanchaca, Australis, Multiexport Foods e Invermar.