Se busca crear una prueba de predicción a través de la huella genética de la enfermedad en la sangre que permitirá identificar a aquellos que van a desarrollar síntomas y extender la infección.
El procedimiento permitiría el diagnóstico precoz y el rápido tratamiento de la enfermedad de pulmón, salvando potencialmente muchas vidas.
Los expertos afirman que la investigación publicada esta semana en la revista científica Nature es extraordinaria pero que es necesario que se lleven a cabo más estudios que confirmen estos datos.
Cada segundo hay un nuevo infectado con tuberculosis y cerca de dos millones de muertes anuales son atribuibles a la enfermedad.
UNO DE CADA DIEZ
Sólo una de cada diez personas infectadas desarrollará la enfermedad mientras que en el resto se encuentra de forma latente y nunca presentarán los síntomas.
En la actualidad existen pruebas para saber si alguien porta la tuberculosis pero es imposible predecir quién va a padecer la enfermedad.
Investigadores del Reino Unido, Estados Unidos y Sudáfrica examinaron la firma genética en la sangre de personas afectadas por tuberculosis.
Y se dieron cuenta que los indicadores genéticos se encontraban en 10% de los pacientes que tienen la infección de forma latente, lo que sugiere que son los candidatos a que la enfermedad llegue a manifestarse.
Ahora se realizará un seguimiento a los pacientes para ver si realmente desarrollan los síntomas.
SALVAR VIDAS
La investigadora principal del estudio, la doctora Anne O'Garra, del Instituto Nacional de Investigación Médica en Londres, afirma que la prueba es una gran promesa pero que se necesita más investigación para confirmar los datos.
"Si se pudiera predecir cuáles de los portadores de la tuberculosis van a desarrollar la enfermedad esto tendría grandes ramificaciones para detener la epidemia global. Tenemos que probarlo, pero es prometedor", declaró O'Garra a Helen Briggs, reportera en temas de salud de la BBC.
Mike Mandelbaum, director ejecutivo de la ONG TB Alert afirmó que el diagnóstico de la tuberculosis es difícil de realizar antes de que la enfermedad se vuelva infecciosa a terceros, especialmente en lugares como los países en vías de desarrollo, que cuentan con menos recursos.
"Una nueva técnica de diagnóstico basado en un análisis de sangre sería extremadamente valiosa para salvar vidas y evitar la propagación de la enfermedad, y sería especialmente importante en personas con el virus de VIH que además tienen tuberculosis, porque el sistema de detección corriente es frecuentemente ineficaz", explicó.
"Esto por primera vez nos permitirá quizás diseñar pruebas que puedan detectar a los que están en mayor riesgo de padecer la enfermedad y, también, como podríamos detener la tuberculosis", declaró por su parte Marc Lipman, presidente de la sección de tuberculosis de la Sociedad Torácica Británica.
"Esos avances están a 20 o 30 años de distancia", agregó.