El aeropuerto de Tegucigalpa permanecerá cerrado al menos 48 horas, mientras se "normaliza la situación", luego del enfrentamiento de ayer entre militares y manifestantes cuando el Presidente depuesto Manuel Zelaya intentó regresar al país, informó hoy una fuente oficial.
A causa de los disturbios del domingo, que dejaron al menos dos muertos, según una fuente oficial hondureña, hubo daños en la cerca de alambre que bordea la pista del aeropuerto, que también hoy está resguardado por policías y militares.
Los incidentes de ayer se registraron casi al final de una multitudinaria manifestación de seguidores del depuesto Presidente Zelaya, quien ayer intentó llegar a Tegucigalpa a bordo de un avión venezolano, pero las nuevas autoridades del país impidieron el aterrizaje del aparato.
Según el nuevo ministro de Relaciones Exteriores, Enrique Ortez, dos personas murieron en el enfrentamiento entre militares y manifestantes.
Los incidentes también causaron una decena de heridos, según cuerpos de socorro.
Zelaya fue detenido y obligado a salir del país el domingo 28 de junio y ese mismo día el Congreso designó presidente de Honduras a su titular, Roberto Micheletti, quien se encuentra aislado internacionalmente, aunque cuenta con el respaldo de las instituciones de su país y una parte de la población.
El depuesto presidente intentó ayer aterrizar en un jet facilitado por Venezuela, que sobrevoló dos veces la capital hondureña, pero los militares se lo impidieron atravesando vehículos en la pista, hasta donde querían ingresar los manifestantes, que rompieron una parte de la valla.
Según autoridades del aeropuerto capitalino, los vuelos se podrían normalizar en dos o tres días, mientras los seguidores de Zelaya advirtieron de que las protestas continuarán hasta que el depuesto presidente sea restituido en el cargo.