La prohibición para el baño y el desarrollo de actividades náuticas o deportivas son parte de las exigencias que desde ayer rigen en la playa grande de Cachagua, comuna de Zapallar, luego de que la Seremi de Salud decretara el cierre del balneario tras detectar la presencia de varios ejemplares de la medusa del tipo Physalia physalis, también conocida como fragata portuguesa.
La titular de la cartera, María Graciela Astudillo, aseguró que "sólo están autorizados los pescadores del sector, junto con la autoridad marítima, para el desarrollo de actividades de extracción y fiscalización".
Respecto de los daños que puede producir el ejemplar, la autoridad aclaró que el leve contacto puede producir "problemas dermatológicos, como alergias, a los que se suma mucho dolor. Incluso, las personas no están ajenas a sufrir un shock neurálgico, o sea, daños en el sistema neurológico, que es el caso más grave". Por lo mismo, Astudillo recalcó la importancia del autocuidado, debido a que "incluso, sus tentáculos pueden ser venenosos aun estando varada en la playa por semanas". En el caso de alguna herida causada por la medusa, la autoridad recomendó limpiar la superficie con suero fisiológico o agua de mar.
FISCALIZACIÓN
A la fecha se han detectado 26 medusas en la playa de Cachagua, lo que para el gobernador marítimo de Valparaíso, capitán Zvonimir Yuras, es señal de advertencia. "Las playas de la V Región se mantienen abiertas, sin embargo, mantenemos personal de la Capitanía de Quintero y Valparaíso efectuando labores de patrullaje para verificar la presencia del organismo", dijo.
La autoridad marítima no descartó que el fenómeno se propague a otros balnearios de la región, aunque "va a depender de las mareas y el viento", tomando en consideración que la semana pasada "se registró un evento en las costas de Arica y Coquimbo".
El alcalde de Zapallar, Nicolás Cox, dijo que el cierre de la playa se hizo efectivo al mediodía de ayer, y que durante la jornada se sacaron 45 medusas que estaban varadas.