Cinco prelados, elegidos por el Vaticano, inspeccionan desde hoy a los Legionarios de Cristo, la congregación fundada por el fallecido sacerdote mexicano Marcial Maciel, investigado por abusos sexuales contra seminaristas y que tuvo una hija con una amante.
Los prelados, según precisaron hoy fuentes vaticanas, investigarán "con lupa" los centros que los Legionarios de Cristo tienen en los cinco continentes y hablarán con sus responsables y con sus miembros para analizar, entre otros asuntos, el sistema formativo y de funcionamiento de la congregación y ver cómo se encuentran psicológicamente tras los escándalos del fundador.
Los prelados también revisarán el estado financiero de la congregación y otros temas de interés.
Uno de ellos, indicaron las fuentes, es saber si se respeta la supresión decidida por Benedicto XVI en 2008 del conocido como "cuarto voto", el voto secreto impuesto por Maciel y que obligaba a sus sacerdotes, bajo pena de excomunión, a no criticar y no denunciar a sus superiores, ni a aspirar a cargos.
Aunque fue suprimido, muchos legionarios, según las fuentes vaticanas, lo siguen manteniendo.
De momento se desconoce el tiempo que durarán las inspecciones, que realizarán los obispos Ricardo Watty Urquidi, de Tepic (México); Ricardo Blázquez Pérez, de Bilbao (España); Ricardo Ezzati Andrello, de Concepción (Chile); Charles Joseph Chaput, de Denver (EEUU), y Giuseppe Versaldi, de Alessandria (Italia).
Watty Urquidi se encargará de inspeccionar los centros de México y Centroamérica; Chaput los de Estados Unidos y Canadá; Versaldi los de Italia, Israel, Corea y Filipinas; Ezzati Andrello los de Suramérica y Ricardo Blázquez Pérez los de Europa, con la excepción de Italia.
Según informaron los Legionarios, los "visitadores" desarrollarán su labor conforme al calendario y programa que establecerá cada uno de ellos y, al concluir, entregarán un informe a la Santa Sede, "que emanará las oportunas disposiciones para la congregación".
El actual superior, el mexicano Álvaro Corcuera, agradeció al Papa "esta ayuda que nos ofrece" y ha pedido a los legionarios que acojan a los "visitadores" en todas sus sedes "con sincera caridad y fe".
La inspección de los Legionarios de Cristo fue ordenada por Benedicto XVI el pasado mes de marzo y en la misiva de aviso el cardenal secretario de Estado, Tarcisio Bertone, indicaba a Corcuera que la misma es de "fundamental importancia y merece la pena consagrarse a ella con amplitud de miras y limpio corazón".
Bertone agregaba que los Legionarios de Cristo "siempre" podrán contar con la ayuda de la Santa Sede "para que, a través de la verdad y la transparencia, en un clima de diálogo fraterno y constructivo, superen las dificultades existentes".
La investigación se anunció menos de dos meses después de que los Legionarios de Cristo confirmaran que Maciel tuvo una amante con la que concibió una hija.
Según el experto en cuestiones vaticanas George Weigel, que escribió una biografía de Juan Pablo II, con la inspección el Vaticano pretende salvar "lo que pueda salvar" de la Legión, para que ésta pueda afrontar el futuro.
El sacerdote Thomas Berg, hasta ahora uno de los Legionarios de Cristo más destacados de EEUU, ha pedido a la congregación que "abjure" de Maciel y que haga una reforma interna, la única manera afirmó de superar la crisis.
Berg, que la abandonó el pasado mes de abril tras 23 años de pertenencia, agregó que, para empezar, todos los retratos de Maciel que siguen colgados en las casas de los Legionarios "deben ser removidos" y se han de "dejar de citar sus escritos en público".
Asimismo, les pidió que abandonen la costumbre de llamar al mexicano Maciel "nuestro padre".
La congregación Legionarios de Cristo fue fundada en México en 1941, hoy la integran 800 sacerdotes y 2.600 seminaristas y está establecida en dieciocho países.
Entre sus centros destacan el Pontificio Ateneo Regina Apostolorum en Roma, así como los seminarios internacionales "Mater Ecclesiae", uno en Roma y el otro en Sao Paulo (Brasil).
También cuenta con 70.000 miembros de la Asociación Regnum Christi (los legionarios laicos).