CIT Group se  suscribió un acuerdo con el Banco de la Reserva Federal en Nueva York por el que esta entidad supervisará numerosas actividades y decisiones que pretenda adoptar en un futuro.

CIT Group, especializado en préstamos a la pequeña y mediana empresa, trata desde hace meses mantenerse a flote y evitar la declaración de quiebra, después de que las autoridades de Estados Unidos le negaran la concesión de más fondos públicos.

El acuerdo exige la presentación a la Reserva de informes periódicos sobre las actividades desarrolladas o que pretenda realizar, restricciones sobre la gestión corporativa y la autorización previa del pago de dividendos o compras de acciones, explicó en un comunicado de prensa.

En un plazo de 75 días, CIT Group deberá presentar el plan que se propone adoptar para fortalecer su gestión corporativa y en dos meses también tendrá que haber informado a la Reserva de las medidas que piensa adoptar para controlar su riesgo crediticio.

La entidad bancaria, que no podrá pagar dividendos ni comprar o canjear acciones sin la previa autorización escrita del banco de la Reserva en Nueva York, tendrá que detallar igualmente sus planes y plazos para mantener un nivel suficiente de capital, así como otra información sobre el presupuesto previsto para lo que resta de este año y para el próximo.

Ese banco informó también que su Consejo de Administración había adoptado un conjunto de medidas, con las que pretende proteger activos que podría perder en el caso de que se produjeran cambios significativos en la composición de su accionariado.

Este banco anunció el pasado lunes, que se veía obligado a aplazar al menos en una semana la presentación de sus resultados trimestrales a causa del proceso de reestructuración que tiene en marcha.

CIT Group ha conseguido un préstamo de US$3.000 millones  de algunos de sus principales titulares de bonos y se propone recomprar bonos por valor de US$1.000 millones que vencen el día 17 de este mes.