"Esto es una advertencia que transgrede su orden, su paz queremos molestar y destruir su capital". Esta es parte del comunicado con letras recortadas de un periódico hallado al lado de la falsa bomba, instalada el 19 de noviembre en un basurero en la estación Baquedano del Metro.

Según la indagatoria, la sospechosa sería una estudiante de intercambio francesa, de 24 años, que llegó a Chile en 2007. La mujer fue captada por las cámaras del Metro y testigos que la conocieron la relacionan con la persona que instaló la falsa bomba.

La estudiante registra salida de Chile a mediados del año pasado, pero se cree que pudo haber reingresado los últimos meses usando otra identidad.

La policía está reconstruyendo su estadía en Chile entre 2007 y 2008 y ha oficiado a Interpol para saber si reside en el extranjero, para desechar la pista.

La información de Carabineros es que en 2007 la mujer se vinculó a grupos de apoyo a la causa mapuche. Incluso, existen fotografías de ella en manifestaciones de solidaridad a las comunidades indígenas. También se vinculó a estudiantes extranjeros y vivió en el centro de Santiago.

Ayer, el gobierno se querelló contra los responsables de la instalación de la falsa bomba, que afectó a unas 60 mil personas, invocando la Ley de Seguridad del Estado. Los autores arriesgan cinco años de cárcel.

En tanto, el lunes se realizó la reunión entre el ministro del Interior (S), Patricio Rosende, y los fiscales Xavier Armendáriz y Francisco Jacir, quienes investigan los más de 100 bombazos ocurridos los últimos años en el país.

La semana pasada, Rosende criticó la labor del Ministerio Público, señalando que había elementos para detener a los responsables de los últimos ataques. Sus palabras fueron refrendadas el viernes por el vicepresidente de la República, Edmundo Pérez Yoma.
 
En la reunión -donde, además, participaron el fiscal nacional, Sabas Chahuán, y los generales de Carabineros Aquiles Blu, director de Orden y Seguridad, y el jefe de Inteligencia, Bruno Villalobos- se pidió el reforzamiento de los equipos policiales. Sin embargo, Rosende no quiso comentar el contenido de la cita.

Por otra parte, Rosende calificó como "habitual" en todo el país los turnos de hasta 14 horas que a diario cumplen los carabineros destinados en la zona de conflicto mapuche. El tema surgió tras la muerte del cabo segundo de Carabineros Claudio Godoy (30), quien falleció producto de un infarto por razones desconocidas.