Comunidades indígenas de Isla de Pascua, desestimaron de antemano los resultados que entregará una mesa de trabajo convocada por el gobierno para resolver el conflicto de ocupaciones de tierras ancestrales en la isla, por que "jamás fueron invitados a participar".
"Es un contrasentido desarrollar estas mesas de trabajo para elaborar propuestas en distintas índoles concernientes a Isla de Pascua, si jamás se consideró incluirnos en la discusión", enfatizó Marisol Hito, vocera de la familia Hito y de los 18 clanes Rapa Nui.
La mesa de trabajo busca dar solución a las demandas de tierras ancestrales, inmigración, estatuto y plan de desarrollo de la isla, que reclaman las comunidades.
En una carta enviada al ministro del Interior, Rodrigo Hizpeter, los clanes Rapa Nui manifestaron que, al no ser incluidos en el diálogo, sus conclusiones "no podrán ser consideradas vinculantes, sino que sólo como apreciaciones del gobierno respecto de lo que es conveniente hacer en la Isla".
Además, recordaron la "violencia" con la que la policía actuó el 7 de septiembre pasado, durante un desalojo a 16 miembros del clan Hitorangi, entre ellos 8 niños, "sin que existiera orden de desalojo".
"Esta situación de violencia estatal fue debidamente informada a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a quien nuestros representantes (Indian Law) solicitaron medidas cautelares el pasado 1 de octubre", agrega la misiva.