Si bien partió tímidamente en las encuestas y hasta la semana pasada, su nombre casi siempre ocupaba los últimos puestos en los sondeos, Clara López, con 15,2% de los votos, se convirtió en una de las ex candidatas que será cortejada tanto por el Presidente Juan Manuel Santos como por el uribista Oscar Zuluaga, para conseguir sus votos en la segunda vuelta del 15 de junio. En conversación con La Tercera, la ex candidata del Polo Democrático analiza sus resultados de las elecciones.

¿A qué atribuye los buenos resultados en las elecciones presidenciales?

Sin duda, con mi compañera de fórmula vicepresidencial (Aída Avella) fuimos capaces de presentar una nueva cara de la izquierda colombiana. Estamos muy satisfechos, hemos logrado consolidar un proyecto de izquierda democrática y hemos logrado un importantísimo resultado en la capital. Ambas cosas nos animan para seguir adelante en la construcción de este proceso de ampliación democrática, que seguramente nos ayudará a crecer en la audiencia, no sólo en las elecciones de consejo, diputados y gobernadores el año entrante, sino que en las presidenciales de 2018.

Usted no tenía buenos resultados en las encuestas. ¿Qué ocurrió?

Creció muchísimo la abstención y además estas elecciones mostraron que el único crecimiento sostenido es el de la izquierda.

¿Qué ocurrirá ahora con el Polo Democrático, van a apoyar al Presidente Juan Manuel Santos o a Oscar Iván Zuluaga?

Estamos en conversaciones al interior de nuestro partido y vamos a hablar con todos los sectores. Queremos consolidar el proyecto de la izquierda, que se profundice. Así es que eso aún no se ha decidido. Tenemos a dos candidatos que son contrarios a nuestro planteamiento. Nuestro programa estuvo fundamentado en la necesidad de hacer un viraje en el modelo económico. Claro que hay diferencias en materia de relaciones internacionales y paz y eso entrará en la discusión.

Los diálogos de paz fueron el tema central de estas elecciones. ¿Qué tan importante son para su coalición?

Hemos apoyado los diálogos en La Habana, pero no creo que sea el único tema central. Los resultados de la elección fueron la demostración de que Colombia necesita cambios profundos en su política económica, además del derecho a la educación y a la salud, eso planteamos en la campaña.

Se estima que en la segunda vuelta también esté presente la "guerra sucia". ¿Cuáles cree que serán las consecuencias?

Esta "guerra sucia" se puede convertir en una crisis de gobernabilidad.