Siguiendo los pasos de Telefónica, el grupo mexicano América Móvil, controlado por el magnate Carlos Slim, anunció un proceso para unificar su negocio de telecomunicaciones en América Latina. El grupo pretende unir las marcas con las que opera en los negocios fijo y móvil y reducir costos con el uso de redes comunes.

América Móvil (AM), que controla la empresa móvil Claro, ofreció un  canje de acciones a Carso Global Telecom, también controlado por Slim. Con ello, AM tomará el control de Carso, dueña de Telmex (59,4%), que opera en México, y Telmex Internacional (60,7%), presente en siete países de la región. Entre ellos, Chile, donde comercializa televisión satelital, telefonía fija e internet.

Según explicó a La Tercera el director financiero de AM, Carlos García Moreno, el plan es adqurir el resto de las acciones de Telmex Internacional si el grupo Carso acepta el canje, con lo que AM se convertiría en el único dueño de la firma. García Moreno explicó que por el remanente deberían pagar unos US$ 6.000 millones, aunque esperan que muchos accionistas deseen canjear acciones.

El consultor Roberto Gurovich dijo que la operación "es una contestación a lo que está haciendo el grupo Telefónica, que busca convertir todo su negocio en Movistar". En la industria opinan lo mismo: "Esta transacción para lograr la convergencia es similar a la combinación de operaciones inalámbricas y fijas de Telefónica de España, Telecom Italia, Deutsche Telecom y otras que han ocurrido en los últimos años", dijo Deutsche Bank en un reporte.

RESTRICCIONES

García dijo que unificarán las marcas en la región -con altas probabilidades de que se utilice Claro-, aunque todo está sujeto a las restricciones de cada país.

En Chile, el grupo deberá respetar una resolución del Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) de enero del 2009, cuando aplicó la libertad tarifaria en la telefonía fija. En ese dictamen, el TDLC recomendó "adoptar medidas que impidan la oferta de paquetes que incluyan telefonía fija y móvil, así como mantener una particular vigilancia de los contratos y acuerdos que suscriban empresas relacionadas, a fin de precaver subsidios cruzados u otras conductas que permitan transferir poder de mercado de uno a otro servicio".