La necesidad de conocer de antemano cuándo y cuánto dinero se obtendrá al momento de tomar un depósito a corto plazo, es una de las razones por las cuales miles de chilenos han decidido utilizar esta modalidad para invertir su dinero. Se trata de uno de los denominados Instrumentos del Mercado del Dinero (IMD), y se caracterizan porque su plazo de vencimiento es inferior a un año.
Este tipo de inversión puede tomarse en pesos o en Unidades de Fomento (UF), y normalmente pagan tanto el capital inicial como los intereses que genera en forma simultánea al vencimiento. Es decir, pertenecen al grupo de los instrumentos denominados "cero cupones" o "sin cupones".

Al optar por un depósito de este tipo, se debe escoger entre tres alternativas para su emisión, cada una con ventajas y desventajas particulares. Estas alternativas de emisión son: al portador, a la orden o nominativo. A continuación se describen sus características.

i) Depósito al portador: El documento puede ser cobrado por quien lo tenga en sus manos el día del vencimiento, sin importar si coincide o no con la persona que lo tomó originalmente. En este caso tampoco se exige un comprobante de que el instrumento fue comprado a la persona que efectivamente tomó el depósito. Esta situación ocurre porque existe total libertad para transferir (vender) el depósito una o más veces durante su vigencia.

ii) Depósito a la orden de: En este caso, quien toma el depósito puede vender el instrumento y quien lo compra puede, a su vez, transferirlo nuevamente, pero debe quedar registro de estas transferencias en el documento. La transferencia ocurre por medio del endoso que la persona que lo vende hace a su comprador.

iii) Depósito nominativo: Aquí el instrumento financiero no es transferible y, por ende, sólo lo puede cobrar la persona que originalmente hizo el depósito.

Cada una de las alternativas mencionadas permite que el inversionista controle de mejor o peor manera la probabilidad de pérdida o robo del instrumento, pero al mismo tiempo genera una mayor o menor flexibilidad para deshacerse de él antes de su vencimiento, en caso de ser necesario.

El depósito nominativo es el que otorga la mejor protección contra pérdidas o robo, pero obliga al inversionista a mantenerlo hasta su vencimiento. Por esta razón sólo se recomienda optar por esta alternativa si se está absolutamente seguro de que no necesitará retirar su inversión antes de tiempo.
 
Depósitos a plazo en pesos

Una característica de los depósitos en pesos es que no están protegidos contra la inflación, ya que la rentabilidad que ofrecen es nominal y no real. Lo más común es que estos depósitos se tomen a plazos que van desde un mínimo de 30 días, aunque algunos bancos ofrecen tomar depósitos a plazos aún menores.

La tasa de estos depósitos normalmente se calcula a un plazo de 30 días, lo que no impide que las personas realicen depósitos a plazos distintos.

Depósitos a plazo en UF

Del mismo modo que su dinero se hace agua en el supermercado por culpa de la inflación, la rentabilidad de muchos de los instrumentos de renta fija se puede esfumar debido a este preocupante fenómeno. La excepción a esta tendencia la constituyen los depósitos a plazo en Unidades de Fomento (UF), ya que estos protegen al inversionista de las alzas en el costo de la vida.

Los depósitos en UF se reajustan mensualmente de acuerdo a la variación que presente el Índice de Precios al Consumidor (IPC), un factor que permite protegerlos parcialmente contra la inflación. Una característica bastante importante, sobre todo en períodos inflacionarios como los observados en años recientes en Chile.

Que el depósito esté denominado en UF implica que el valor inicial invertido, más los intereses pagados, se expresen en esta unidad, la que refleja los cambios en el valor de la moneda. Este tipo de depósitos normalmente posee un plazo mínimo de 90 días, con una tasa de interés ofrecida por los bancos que se expresa en base a 360 días, lo que se denomina base anual.