El jueves, Claudio Borghi se reunió con el vicepresidente de Blanco y Negro, Aníbal Mosa, quien lo considera como su preferido para asumir la banca de Colo Colo.

La gestión del titular de la Comisión Fútbol de los albos es, hasta ahora, a título personal y refleja la división que existe en la concesionaria, en la que los dos bloques que se disputan el control buscan entrenadores de distintos perfiles. La opción del "Bichi" no genera consenso con Salah y Vial, por discrepancias que se arrastran desde cuando Omar Labruna dejó el club y el ex seleccionador fue contactado, a su juicio, tardíamente por la dirigencia. Borghi interpretó que no era la primera opción para asumir el puesto.

Sin embargo, el transandino cuenta con el amplio respaldo del plantel para asumir el proceso.

Eso explica que, por el momento, Mosa aún no le haya ofrecido formalmente la banca popular al "Bichi". La primera reunión entre ambos tenía como objetivo conocerse y ratificar la intención de que el estratega retorne a Pedreros.

Borghi está abierto a dirigir Colo Colo. Así se lo ha dejado claro a varios cercanos desde que supo que los albos buscaban un nuevo entrenador. Sin embargo, en la conversación con Mosa, el "Bichi" estableció ciertas condiciones para su regreso a Macul.

La primera exigencia es que Miguel Riffo, actual ayudante del interino Héctor Tapia, sea su más estrecho colaborador en la banca. Borghi considera al ex zaguero central como un ejemplo de superación. En ese contexto, siempre ha expresado su admiración por la forma en que el ex defensor se sobrepuso a los problemas físicos que sufrió producto de una malformación congénita en uno de sus pies.

Estabilidad

El ex seleccionador ha visto con preocupación la constante rotación de entrenadores en el club albo. En ese sentido, otra de sus peticiones fue un contrato que le garantice, al menos, dos años de permanencia. En ese plazo, el ex mediocampista pretende desarrollar un proyecto deportivo integral, que involucre el trabajo con las divisiones inferiores, cuya presencia en el primer equipo ha disminuido fuertemente en los últimos años.

El requisito también está relacionado con las últimas experiencias del "Bichi" en Independiente, Boca Juniors y en la Selección, y con la exigencia que les planteó a sus cercanos, que le pidieron una permanencia más prolongada en el nuevo empleo.

Refuerzos

En diciembre, los albos sólo podrán incorporar a cuatro jugadores. Por esa razón, Borghi no quiere correr riesgos y pidió que los cuatro refuerzos sean de nivel y extranjeros.

Esa decisión involucrará desafectar a algunos de los foráneos que integran el actual equipo, para liberar cupos. Mauro Olivi, uno de los de peor rendimiento, podría ser uno de los primeros que deje Pedreros. Fabián Benítez sería otro jugador que no entraría en los planes del DT.

Eso sí, aún no ha revelado una lista de incorporaciones.

Sin Gutiérrez

El último planteamiento del DT es su intención de tener injerencia directa en la elección de un nuevo director deportivo. Hasta hoy, Juan Gutiérrez sigue en el cargo, pero son conocidas las desavenencias que ambos tuvieron en la primera etapa del "Bichi" en Colo Colo, cuando Gutiérrez trabajaba en las divisiones inferiores del club.

El problema para desligarse de Gutiérrez es económico, pues el funcionario tiene contrato por cuatro años, a razón de $ 10 millones líquidos mensuales. El vínculo establece que no puede ser derivado a otra función. En ese caso, el contrato debería ser finiquitado y redactarse uno nuevo.