Claudio Bravo ocupó la expresión precisa. Habló de 'dar la cara' para referirse a la actitud que tenía que tomar para analizar la improductiva fecha eliminatoria, con derrotas consecutivas ante Paraguay y Bolivia. "Es un análisis difícil.No era lo que esperábamos ni estábamos acostumbrados a vivir. Esto es así, son las Eliminatorias más duras y difíciles del mundo. No esperábamos sumar cero puntos. No era el escenario que nosotros esperábamos. Estamos acostumbrados a jugar bien y sumar. A controlar el juego y sumar de a tres. Somos autocríticos y sabemos cuando recibir la crítica y el elogio también. Que nos sirva para progresar también. (Entender que) Que somos un equipo vulnerable, que no podemos haber ganado lo vamos a hacer siempre", dijo.

En ese sentido, reforzó que su intención es insistir en la búsqueda de la clasificación. "Espero jugar una tercera Copa del Mundo. Para eso, tenemos que seguir trabajando. Es un escenario complejo". Y llamó a la cordura respecto de los anuncios de retiro de la Selección de compañeros suyos como Arturo Vidal. "En caliente, muchos hemos hablado de no venir más, de dejar la Selección. En frío, tampoco es tan definitivo. Si sumamos en la próxima fecha, cambia. Por dos partidos, no vamos a echar a perder lo que hicimos. La gente es alarmista también.

Somos conscientes de que no lo hicimos bien, que no fue lo que esperábamos", afirmó. "Cuando termina un partido, se te pasan muchas cosas por la cabeza. Más en frío, tienes que pensar las cosas de otra manera. Los desafíos son lindos", agregó después.

En tal sentido, optó por tratar de entender la crítica. "Cuando no se dan los resultados, siempre se critica al técnico. Yo estoy dentro y cuando tengo una mala actuación, me tengo que comer las críticas. Ya vendran los buenos tiempos Ahora tenemos que pensar en sacar adelante el partido que tenemos en casa. Necesitamos que la gente nos apoye", dijo.

Finalmente, insistió en reprochar a Cac1ke, la firma de Jaime Valdés, que pidió su presencia y la de Matías Fernández en la Selección. "Cuando ganas cosas, nadie se acuerda de otros jugadores. Nadie nombró a Jaime o a Matías después de la Confederaciones. Hay que aceptarlo. Tengo más que claro con los años de circo cómo es esto. Tenemos una oportunidad maravillosa de revertir esto. Hay que ponerle pecho a las balas, con la humildad que nos caracteriza desde el minuto uno. Somos todos grandes, sabemos lo que tenemos que hacer", concluyó.