El "no" a la re-reelección y el fin del mandato
Tras las primarias, "la posibilidad de re-reelección (de Cristina Fernández) está definitivamente archivada", dijo a La Tercera el analista José Angel Di Mauro. Ahora la cuestión es si Fernández podrá gobernar los dos años que le restan o convocará elecciones anticipadas, aduciendo problemas de salud, para evitar el crecimiento político de Sergio Massa. "Lo más probable es que el período presidencial se complete", dice el sociólogo Manuel Mora y Araujo, mientras el experto en peronismo Jorge Asis relativiza las denuncias de un "golpe institucional". Pero la propia Presidenta parece alimentar esta idea. El recién publicado libro La cabeza de Cristina reproduce el que sería su diálogo con Carlos Zannini, su "mano derecha": "Si ganan bien el 27 de octubre, van a hacer lo imposible para que no pueda gobernar los dos años que vienen". Pero según el diario Clarín, el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, ya notificó a los empresarios que vienen "dos años largos de gobernabilidad".
Carrera presidencial desatada
Superado el debate por la re-reelección de Fernández, varios nombres pelearán por posicionarse en la carrera hacia la Presidencia en 2015. Según el diario local La Nación, dentro del peronismo Daniel Scioli, Sergio Massa y José Manuel de la Sota se perfilan como candidatos. El kirchnerismo duro buscaría convertir al gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, y no a Scioli, en su delfín. A ellos deberían sumarse un candidato de la centroderecha (seguramente el alcalde porteño Mauricio Macri) y otro de la centroizquierda. "El kirchnerismo ha dejado en claro que Scioli no es la 'continuidad' (pues) no lo ven como posible sucesor de Fernández", explicó Mariano Confalonieri, autor de biografía de Scioli, El Candidato. Los analistas coinciden en que si Massa traspasa hoy la barrera sicológica de los 40 puntos, se posicionará para 2015. En cambio, una victoria más estrecha podría ser ventajosa para Scioli.
El desafío de Massa de alinear al peronismo disidente
"El gobernador de Buenos Aires parece recostarse en la estructura del Partido Justicialista (peronista) que preside y en los gobernadores, mientras que Massa busca a intendentes (alcaldes) y convoca dirigentes de otras fuerzas sin abandonar el peronismo", dice el politólogo Rosendo Fraga. ¿Pero podrá Massa alinear a los disidentes luego de los comicios de hoy? "No lo veo tan simple", dice Mora y Araujo. "El 'peronismo disidente' no es una entidad orgánica. Algunos van a seguir a Massa, otros a Scioli, y otros buscaran posiciones legislativas, o locales, por distintos caminos", agrega. Según Di Mauro, Massa "apostará a los intendentes y viene haciendo contactos con varios del interior del país (porque) sabe que muchos gobernadores lo miran con desconfianza".
Presidenta pierde apoyo y teme división interna
El columnista Damián Glanz dice que "el kirchnerismo experimenta el miedo a la desintegración", ya que este sector "comprendió que sin importar el resultado de las elecciones, a medida que se agote el mandato presidencial se diluirá el proyecto de poder que encabeza Fernández". Si el resultado de hoy es el que pronostican los sondeos, el columnista de La Nación Fernando Laborda cree que "es más que probable que no pocos líderes territoriales del peronismo reclamen cambios". Así, sostiene el diario, Fernández "deberá elegir entre dos caminos: un pacto con el PJ y los gobernadores kirchneristas o la 'profundización del modelo'". "El nivel de fuga (de diputados oficialista tras las elecciones) ahora dependerá de lo que hagan los gobernadores", admitió un diputado del Frente para la Victoria citado por el periódico Perfil.
Gobernadores se despegan de la Casa Rosada
Los analistas consideran que para que haya un "aterrizaje suave" tras los comicios, los gobernadores peronistas deberán ser protagonistas. Según Gabriel Ziblat, de Perfil, en el nuevo contexto el control que los gobernadores tienen sobre los legisladores de sus provincias marcará la suerte del bloque. "Los que no dependen financieramente del Ejecutivo van a empezar a mostrar más autonomía", opina un peronista disidente, que igual consideró que los gobernadores justicialistas "sostendrán a Cristina". Pero para llegar fortalecidos a 2015, le pedirán "pacificar la agenda". "Los gobernadores comenzarán a tejer una alianza donde le digan a Cristina 'vamos a co-gobernar un poquito, porque si no, esto se puede volver muy costoso para todos'", predice el consultor Roberto Starke. Algunos analistas interpretan que la frase de Scioli, apelando a que todos "ayuden a que el gobierno termine de la mejor manera posible", va en ese sentido.