Toronto está agitada por la llegada del Real Madrid, donde mañana enfrentará al equipo local en un partido amistoso que inaugura la gira americana de los "merengues".
Y la dirigencia del Toronto FC no escatima en gastos para jugar ante el plantel más caro del mundo, liderado por Manuel Pellegrini. De ahí que decidieran cambiar la cancha del estadio BMO Field Vale.
El club canadiense decidió invertir nada menos que US$ 250 mil para sacar el césped artificial e instalar pasto natural de primer nivel. La nueva cancha apenas durará 10 días, pero los directivos del Toronto FC aseguran que deben presentar una superficie a la altura de los madridistas.
"Esta es una solución para sólo 10 días, pero que reflejan la calidad del juego que veremos este viernes", comentó Bob Hunter, vicepresidente de la empresa que colocará la nueva cancha, en el diario de Canadá The Star.