Durante los últimos años, el Club Hípico de Santiago ha orientado sus inversiones en renovar espacios y generar proyectos que permitan ofrecer mejores servicios a sus clientes y abrirse a nuevos públicos.
Junto con su principal actividad, la hípica, para la cual estrenó en 2013 una pista de arena, de un costo de US$ 7 millones -la inversión más importante en los últimos años-, también se ha enfocado en ocupar sus instalaciones como centro de eventos, realizando matrimonios, festivales y recitales de música, ferias y comidas para empresas, entre otros.
El valor arquitectónico y paisajístico que tiene el recinto, emplazado en 80 ha del edificio construido por el arquitecto chileno Josué Smith Solar e inaugurado en 1923, le dio la categoría de Monumento Histórico a gran parte de su estructura.
Su estilo neoclásico, con influencias europeas, así como los detalles de la construcción, cautivan a quienes llegan todos los viernes, lunes por medio y ocho domingos al año a realizar sus apuestas. El resto de la semana se mantiene cerrado al público general, algo que la gerencia quiere cambiar, habilitando nuevos espacios.
Para lograrlo, se hicieron nueve palcos con terraza y butacas importadas para los socios, y actualmente se trabaja en la remodelación de un nuevo lugar para asados.
Su ubicación será el "Parque de los 400", por estar a la altura de los 400 metros de las pistas, donde se está construyendo un casino y habilitando 42 parrillas.
Asimismo, para acercar a los vecinos del Club Hípico, residentes de los barrios Viel, Rondizzoni y República, se están entregando tarjetas de ingreso preferencial para invitarlos a visitar el recinto.
Oferta gastronómica
Pese a que actualmente hay tres restaurantes en su interior, que funcionan todos los días, el Club Hípico espera tener una oferta gastronómica más diversa a principios de 2015, instalando restaurantes de renombre y prestigio. Un proyecto que está en estudio y que permitiría atraer nuevos públicos a la actividad hípica.
¿Sus fortalezas? Los 2.500 estacionamientos que hay en su interior, la vista privilegiada que tiene el edificio patrimonial hacia las pistas de carrera y la cordillera de los Andes, además de su valor arquitectónico, una mezcla que para el gerente general Juan Pablo Lira hace del recinto un lugar único en Santiago.
Otro de los proyectos que trabaja la gerencia para 2015 está enfocado en atraer a más turistas, de modo que puedan recorrer el recinto con visitas guiadas.
Luis Molina, arquitecto desde hace 20 años del Club Hípico, explica que "desde que se creó la Red Teletrak, la tendencia es que menos gente nos visite. Sin embargo, acá hay una tradición que no queremos perder. Está la infraestructura y queremos que mucha más gente la pueda disfrutar".