Las mejores perspectivas para la economía global han impulsado la cotización de los metales, en general, y del cobre en particular, que este lunes tocó un nuevo máximo desde fines de 2014 y que podría ir en busca de los US$ 3 la libra en las próximas semanas.

El principal producto de exportación de Chile escaló 0,95% hasta US$ 2,955 la libra, su nivel más alto desde el 15 de diciembre de 2014 (US$ 2,97). La última vez que estuvo en US$ 3 fue el 27 de noviembre de ese año.

El avance "se debe, principalmente, a un incremento en las posiciones especulativas y una mejora sustancial en la expectativa de crecimiento de la economía global, lo que se ha traducido en un aumento la demanda agregada del metal rojo", aseguró Matías Urrutia, gerente de mercados financieros de VanTrust Capital.

El experto anticipa que el mineral podría llegar a los US$ 3,1 la libra en las próximas semanas, aunque "US$ 3 la libra es una resistencia técnica relevante".

Diego Mora, analista de mercado XTB Latam, también estima que la materia prima podría subir hasta US$ 3,1 "siempre y cuando los datos de la próxima semana, como producción industrial y PMI manufacturero de Caixin (China), sean favorables en la demanda y oferta de cobre".

Para Hernán Merino, gerente de Estrategia de Vision AGF, es "probable" que el metal llegue a US$ 3 y que oscile en torno a ese valor, pues "hay un rebalanceo en la demanda global que permite darle un poco más de sostenibilidad al precio del cobre en el mediano plazo"

Por su parte, Francisca Pérez, economista senior de Bci Estudios, proyecta que el commodity podría ubicarse en US$ 3 la libra en el corto plazo, pero esto sería temporal "ya que el principal motivo detrás del aumento reciente es su utilización como activo refugio ante momentos de incertidumbre, debido sobre todo a dudas sobre la gobernabilidad de Trump".

A su juicio, el cobre debería bajar a US$ 2,8 la libra hacia fin de año, para luego repuntar a US$ 3,2 la libra a mediados de 2018.

Dólar a la baja

La ganancia del mineral, junto con la debilidad del dólar a nivel internacional, presionó al a baja al tipo de cambio, que este lunes declinó $ 3,7 y cerró en $ 642,9, su mínimo desde febrero.

Los expertos pronostican que el billete verde podría seguir retrocediendo en un horizonte cercano.

Según Mora, de XTB Latam, si el cobre sigue trepando, los datos en Asia repuntan y el dólar pierde impulso por las tensiones geopolíticas, "no sería extraño ver un dólar en $ 635, piso máximo del año 2017", aunque el piso natural debiese estar en $ 640.

Merino, de Vision AGF, augura que el peso seguirá apreciándose hasta $ 630 "o inclusive algo menos".

Urrutia, de VanTrust Capital, presagia que el tipo de cambio podría descender hasta $625-$635 este año, "pero los riesgos de corto plazo continúan siendo alcistas".

En tanto, Pérez, de Bci Estudios, no descarta que el peso se fortalezca, pero reitera que este sería un movimiento temporal.