Con una baja de más de 1% cerró el martes la cotización del cobre en la Bolsa de Metales de Londres (LME en inglés), presionado por la evoluación d elas monedas -tanto el euro como el dólar- y la subida en los inventarios físicos del metal, que han puesto a los inversionistas alerta sobre la evolución de la demanda.
La cotización del metal retrocedió un 1,38% hasta los US$2,937010 por libra, frente a los US$2,97783 por libra del lunes.
Los inversores también estaban a la espera del dato de importación de cobre en bruto y productos semielaborados de China en octubre, que se espera para esta semana, como también del dato de producción del metal rojo en el gigante asiático.
"La gente va a esperar y ver cómo están las cifras que saldrán de China", dijo a Reuters Charles Kernot, analista de Evolution Securities. "Fue una sorpresa positiva el mes pasado. Será una sorpresa en la otra dirección (este mes)", aseguró. "Una cantidad justa de debilidad", agregó Kernot.
El uso de cobre en China, mayor consumidor mundial del metal, usualmente entra en una temporada relativamente tranquila en la segunda mitad de noviembre.
Haciendo sombra sobre la perspectiva de la demanda, los inventarios de cobre en la LME han subido desde julio. El último incremento en las existencias fue de 4.675 toneladas a un máximo de seis meses de 394.150 toneladas.
Los inventarios del metal en Shangái subieron a su nivel más alto en cinco años y medio la semana pasada.
Hacia adelante los analistas ven un mayor debilitamiento del dólar, actualmente operando cerca de mínimos de 15 meses frente a una cesta de seis importantes divisas.
El cobre, usado en energía y construcción, avanzó el lunes debido a que una caída del dólar hizo que las materias primas cotizadas en la moneda estadounidense fueran más baratas para los tenedores de otras divisas. El metal rojo ha más que duplicado su valor este año, conducido por las fuertes compras de China y la debilidad del dólar.