El precio contado del cobre cerró con un avance de 0,49% este martes en la Bolsa de Metales de Londres, con lo que completó su cuarta sesión consecutiva de aumentos, impulsado por la debilidad del dólar, las señales de ajustados suministros y las expectativas de nuevas medidas de estímulo económico en China, que consume casi la mitad del cobre mundial.

El metal rojo terminó las operaciones a US$2,76 la libra comparado con US$2,74 la libra del cierre anterior, anotando su valor más alto desde el 30 de marzo.

El cobre se ha estado consolidando desde que toco mínimos de casi seis años en enero, ya que inesperadas interrupciones de suministros llevaron a analistas a reducir sus pronósticos de un superávit en el 2015.

Las preocupaciones sobre la demanda china han mantenido limitadas las ganancias del metal aunque las preocupaciones se disiparon levemente tras los comentarios de funcionarios chinos sobre medidas para apuntalar el crecimiento económico.

En tanto, el dólar caía frente a una canasta de monedas antes de una reunión de política monetaria de la Reserva Federal de Estados Unidos más tarde este martes. Una serie de desalentadores datos económicos en ese país han disipado las expectativas del mercado de que la Fed eleve las tasas de interés en junio.

Un dólar débil abarata el valor de los metales en dólares para los inversores fuera de Estados Unidos.

Datos diarios de la LME mostraron que las existencias de cobre cayeron a 338.250 toneladas. El incremento en los inventarios de cobre en el primer trimestre de este año se ha reducido en el segundo, indicando un ajuste de suministros.