A la baja cerró el viernes la cotización del cobre en la Bolsa de Metales de Londres (LME en inglés), en un mercado que se encontraba expectante esperando las cifras de empleo de EEUU y en medio de un nuevo incremento en los inventarios físicos del metal.

La cotización del metal retrocedió un 0,6% hasta los US$3,18694 por libra el viernes, frente a los US$ 3,20735 por libra del jueves, su máximo precio del año.

Se cree que las nóminas del empleo no agrícola en Estados Unidos bajaron en 130.000 en noviembre, tras un recorte de 190.000 puestos de trabajo en octubre. Según las previsiones, la tasa de desempleo se mantendría a en el 10,2%.

"Puede salir más alta de lo esperado", dijo Eugen Weinberg, analista de Commerzbank. "El mercado se estuvo recalentando durante la semana pasada (...) sería más saludable que se corrigiera", agregó.

"Algunas personas están reconsiderando sus posiciones debido a que el mercado estaba siendo guiado por los constantes flujos de fondos", explicó Weinberg.

Los precios del metal rojo se han más que duplicado este año y están encaminados a su mayor avance anual desde al menos 1978.

Un dólar débil, compras chinas, mejores datos económicos y nuevo dinero de inversores, han impulsado los precios del metal industrial en el 2009.

Como signo de que los fundamentos siguen débiles, los inventarios de cobre en la LME treparon en 675 toneladas a 446.075 toneladas, su nivel más alto desde abril.

"Estamos muy preocupados, no sólo por los inventarios informados sino también por aquellos en China e invisibles para el mercado", dijo Weinberg.

Aunque operaba estable el viernes, un dólar débil hace que los metales cotizados en la divisa estadounidense sean más baratos para los tenedores de otras monedas.