Los dos bellos tantos de Lezcano hicieron saltar a todos los hinchas de Rancagua y, de paso, le pusieron un manto de preocupación al líder del Clausura, Cobresal, que ve peligrar el primer título de su historia. O'Higgins se impuso por 2-0 y le puso una cuota importante de suspenso al desenlace del campeonato.

Apenas cinco minutos le duró a Cobresal la ambición con la que saltó a la cancha y con la que consiguió amedrentar a O' Higgins. Contagiado por la voracidad de sus compañeros, Salazar probó fortuna con un disparo desde el centro de la cancha que a punto estuvo de sorprender a Carranza, que capturó la pelota en dos tiempos sobre la misma línea de meta. Se habían consumido sólo dos minutos de juego en Rancagua.

Pero tras acariciar la apertura de la cuenta con el que pudo ser uno de los goles del torneo, el conjunto albinaranja se desinfló por completo. O'Higgins, que monopolizó y administró con acierto la posesión de la pelota, fue muy superior a su rival durante todo el primer tiempo, y logró estrenar el marcador a los 20 minutos por mediación de Lezcano.

En su regreso a la titularidad, el ariete de la escuadra celeste recibió la pelota en la  frontal del área, se la acomodó para disparar con la pierna derecha, y la puso lejos del alcance de Nico Peric, pegada al poste izquierdo.

El equipo dirigido por Giovagnoli, que abusó del juego directo y que no fue capaz de encontrar en ningún momento a Matías Donoso, aislado en la punta del ataque, pudo lograr la igualdad a los 26', pero Sarabia, como ya ocurriera en el Monumental ante Colo Colo, no fue capaz de convertir en gol el polémico penal de que dispuso. La patada de Opazo en el rostro de Johan Fuentes existió, pero la infracción se produjo fuera del área. La ejecución de Sarabia, imprecisa, se perdió por encima del larguero.

La ventaja del equipo rancagüino pudo ser mayor antes del entretiempo, pero Peric, en el mano a mano ante Pinto, y Martorell bajo palos ante el remate posterior del Gato Lezcano, evitaron el 2-0 en el 40'.

El paso por camarines espoleó a los mineros, que rozaron la igualdad en un remate de chilena de Donoso desde el vértice del área.

Sin embargo, a los 70, una nueva genialidad de Lezcano terminó de sepultar a Cobresal. Los mineros ya no pueden dar más ventaja, si quieren la corona.