El chef español José Andrés presentó en Washington una peculiar batalla culinaria que él mismo organiza desde hace seis años y en la que cinco prestigiosos cocineros compiten en beneficio del comedor social de la capital de Estados Unidos.
Cinco jefes de cocina, 60 restaurantes locales y cientos de amantes de la gastronomía son los ingredientes de "Capital Food Fight", un concepto que José Andrés, quien cuenta con 7 restaurantes en el área de Washington, desarrolló hace 6 años.
"La idea es sencilla: simplemente se me ocurrió invitar a los mejores chefs a competir para recaudar dinero y ayudar a los más necesitados", dijo José Andrés minutos antes del acto.
Esos necesitados son los que acuden cada día, desde hace más de 20 años, a DC Central Kitchen, el comedor social al que irán a parar todos los fondos que se recauden a partir de las entradas y los patrocinadores del acto.
LUCHA CONTRA EL HAMBRE
"No estamos aquí para elegir el mejor chef, sino para celebrar la lucha contra el hambre, la labor de este comedor al dar de comer a 7 millones de personas al día y al dar a indigentes la oportunidad de aprender el oficio de la hostelería", añadió José Andrés.
Según el chef español, que fue el presentador del acto, la selección de los cocineros participantes se hace "entre amigos", teniendo en cuenta a los jefes de cocina más destacados e innovadores del panorama local.
Dos de los chefs que compiten este año, Bryan Voltaggio y Mike Isabella, han adquirido fama nacional gracias al programa de telerrealidad "Top Chef", lo que ha aumentado el prestigio de sus restaurantes, Volt y Zaytinya.
Para Voltaggio, que ya compitió en 2007, lo más emocionante es "no saber qué vas a cocinar hasta que estás en la mesa".
RESTAURANTES
La batalla de los chefs, tuvo como complemento una selección de lo mejor de los fogones de 60 restaurantes de prestigio de Washington, que se repartieron a lo largo de dos pisos del edificio Ronald Reagan de la capital.
Entre ellos se encontraba, por segundo año consecutivo, La Taberna del Alabardero, un restaurante madrileño que ya ha cumplido 20 años en Washington y que abrió hace un año un nuevo local en Seattle.
Según dijo su representante, Javier Velázquez, el éxito de este tipo de actos "demuestra que en esta ciudad de ejecutivos y políticos se está abriendo un nuevo tipo de turismo, el gastronómico", y en este marco, es "necesario" promocionar a España como destino por excelencia.
Como primer paso, el mostrador de El Alabardero ofreció un clásico melón con jamón serrano y una versión minimalista de la especialidad de la taberna: el bacalao.