En Colo Colo dividen su tiempo entre los partidos, los entrenamientos y el Tribunal de Disciplina de la ANFP. Es que ya se ha hecho costumbre que, prácticamente todas las semanas, los albos tengan que acudir al organismo jurídico del fútbol chileno, ya sea por uno u otro motivo.

Esta vez no será la excepción. Claro, porque en Chillán, ante Ñublense, el árbitro Claudio Puga expulsó al capitán del Cacique, Gonzalo Fierro; al técnico, Héctor Tapia; y al preparador físico Juan Ramírez.

Y como en Blanco y Negro no están muy de acuerdo con las decisiones del juez, apelarán en los casos del adiestrador y del lateral derecho del elenco de Macul.

La tarjeta roja de este último fue la que gatilló las demás, ya que provocó la molestia generalizada del equipo blanco, que se desgastó en reclamos contra el cuerpo arbitral.

Fierro, que estaba a una amarilla de la suspensión, fue expulsado por doble amonestación. Por lo mismo, en un principio se estaba perdiendo sólo el próximo partido, ante Universidad de Concepción. Sin embargo, la segunda amarilla y la posterior roja lo deja en duda para el siguiente compromiso. Y no es cualquiera, sino que se trata del Superclásico ante Universidad de Chile, el sábado 14 de marzo, en el estadio Nacional.

Tapia ya había dejado entrever el domingo en el estadio Nelson Oyarzún que se harían gestiones para que tanto él como Fierro queden absueltos. Ayer, estas acciones fueron confirmadas por el gerente general de ByN, Alejandro Paul.

"Vamos a ir a defender a Gonzalo, con las imágenes, de la sanción. Es absolutamente injusta y las imágenes hablan por sí mismas. Creemos que hubo una simulación exitosa grave de parte del jugador de Ñublense, así que esperamos que le borren la amarilla y que no le contabilicen la expulsión y que pueda jugar el próximo domingo (...) Si lo sancionan tendría a los menos dos fechas de suspensión, por la quinta amarilla más la expulsión y se podría perder el clásico. Queremos justicia", aseguró en radio ADN.

En el caso de Tapia, el ejecutivo agregó que "fue a disculparse con el árbitro, porque él estaba respondiendo a una agresión donde lo salivaron desde la galería y lo estaban empapelando a garabatos. Fue erróneamente sacado de la banca".

Quien quedó a su merced fue el preparador físico Juan Ramírez.