El ministro de Defensa colombiano Gabriel Silva dijo hoy que en los próximos días entregará a su homólogo de Ecuador Javier Ponce información sobre la presencia de campamentos de las Farc en ese país.
"En los próximos días, por instrucción del señor Presidente (Alvaro Uribe), voy a suministrar información precisa al ministro de Defensa de Ecuador sobre algunos campamentos que tienen las Farc en su país", informó Silva a periodistas en la capital colombiana.
"Esperamos que esa información lleve a acciones contundentes, como estamos seguros lo desea el Presidente (Rafael) Correa y todo su gobierno", agregó el funcionario.
El ministro ecuatoriano de Seguridad Miguel Carvajal declaró que por tratarse de "información sensible" esos datos debían ser procesados por los canales "adecuados". "No es un canal apropiado hacerlo por los medios de comunicación", señaló en radio Sonorama.
Pidió a Colombia "que nos entreguen la información y la procesaremos".
Recordó que la embajada de Argentina está encargada de los asuntos ecuatorianos frente a Colombia, a raíz de que los dos países rompieron relaciones diplomáticas en marzo de 2008.
De todos modos, Silva fue claro en afirmar que el gobierno colombiano nunca ha tenido sospechas de que la administración de Quito encubra a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc). "El gobierno colombiano nunca ha manifestado que tenga sospechas de vínculos entre el gobierno del Ecuador y las Farc", dijo Silva.
El ministro reflexionó que "todos los países, sobre todo los vecinos, deben comprometerse por su propio bien en la lucha contra el narcoterrorismo y el tráfico de drogas".
Para el viernes está programada una reunión entre los cancilleres de Colombia y Ecuador, Jaime Bermúdez y Fander Falconí, respectivamente, en el puente fronterizo binacional, en la que se espera que también esté el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA) José Miguel Insulza.
El encuentro es un nuevo paso en los intentos por reanudar las relaciones diplomáticas bilaterales, que Ecuador decidió romper después de que el 1 de marzo del 2008 militares colombianos incursionaron en su territorio para atacar un campamento clandestino de las Farc y mató a 25 personas, incluido el segundo jefe de la guerrilla, el comandante Raúl Reyes.