La Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) registró durante 2012 la muerte de 104 aborígenes y el desplazamiento forzado de 12.304 nativos en el oeste del país, principalmente a causa del conflicto armado, según un informe que la AFP conoció este sábado.
Las muertes de los indígenas corresponden a asesinatos selectivos, víctimas de minas antipersonal, combates entre grupos armados ilegales y legales, además de muerte de menores de edad a causa de desnutrición o falta de atención médica, precisó el reporte.
La ONIC reportó el asesinato selectivo de 21 líderes entre los 104 muertos; que los pueblos indígenas más afectados fueron los Nasa, Embera y Awá; y que las regiones de Cauca, Nariño, Risaralda y Chocó fueron donde más reportes de víctimas se registraron.
Las comunidades indígenas asentadas en estas regiones, se ven afectadas por el conflicto armado interno de casi medio siglo, que enfrenta a las fuerzas del Estado con las guerrillas izquierdistas, grupos paramilitares de extrema derecha, narcotraficantes y bandas criminales.
La ONIC refirió que el pasado año se registraron en Colombia 44 eventos de desplazamiento masivo, que obligaron a 2.722 familias integradas por 12.304 personas, a dejar sus viviendas o sitios de residencia, como consecuencia de la intensificación del conflicto armado, particularmente en Cauca y Nariño.
Asimismo, esta organización recordó que en enero pasado denunció ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos el alto riesgo de exterminio físico y cultural en que se encuentran 66 pueblos indígenas, que representa el 62,7% de los 102 existentes en Colombia.
Según el estatal Departamento Administrativo Nacional de Estadística, hay registrada una población total de más de 1,4 millones de indígenas, el 3,4% de la población total de Colombia.
