Hoy 22 de junio en toda Colombia se recuerda el día fatídico en que el defensa Andrés Escobar marcó un autogol en el partido que enfrentaba a su selección y Estados Unidos en el Mundial de 1994.
El tanto en contra del jugador selló la eliminación del equipo colombiano de la cita mundial, aunque la verdadera tragedia se desataría días después cuando se conoció la muerte de Escobar en un local nocturno de Medellín.
Inmediatamente se ligó su deceso a carteles de droga y casas de apuestas que perdieron mucho dinero con la eliminación de la selección "cafetera", que se había encumbrado como una de las favoritas tras el 5-0 que le propinó a Argentina en Buenos Aires. Jugadores como René Higuita, Carlos Valderrama, Faustino Asprilla, Freddy Rincón y el "Tren" Valencia construyeron las ilusiones de un país que se veía favorito por primera vez en su historia y que se derrumbaron con el gol en contra.
La conexión nunca se pudo probar pero sí se encontró al asesino, Humberto Muñoz Castro, quien se encontró con Escobar días después de su arribo a Colombia en una discotheque de Medellín y soltó doce tiros en contra del jugador del Atlético Nacional. El "Caballero", como se le conocía a Escobar, llegó sin vida al hospital.
A su funeral asistieron más de 100 mil personas, mientras que Muñoz fue condenado a 43 años de cárcel.
"Fue el reflejo de la época"
Freddy Rincón, uno de los compañeros de Escobar en esa selección de 1994, recordó el hecho desde Sao Paulo, en donde reside actualmente.
"Fue un momento muy triste. Andrés Escobar era mi compañero y además mi amigo. En aquellos momentos había mucha violencia en Colombia, pero no imaginamos que podía ocurrir una cosa así. La muerte de Escobar fue el reflejo de la época. Le tocó a él en ese momento y fue un momento muy duro", dijo Rincón.
"Cuando supe la noticia estaba en casa. Habíamos llegado del Mundial de Estados Unidos y estuve con Andrés Escobar un día antes de su muerte. Cuando me comunicaron la noticia no me lo podía creer y me acuerdo que se me cayó al suelo una cosa que tenía en la mano. Fue un golpe muy duro y tuve unas ganas inmensas de llorar. Escobar fue una gran persona", cerró el ex jugador de América de Cali, Palmeiras, Nápoles y Real Madrid, entre otros clubes.