Enfrentando condiciones climáticas extremas y los desafíos que impone el altiplano, 38 alumnos de establecimientos educacionales de Alto Hospicio e Iquique participaron en una jornada de supervivencia en el salar del Huasco, donde recibieron instrucción de comandos del Ejército de Chile.
La jornada, que es financiada por la minera Doña Inés de Collahuasi, busca desarrollar potencialidades y habilidades entre los estudiantes, los cuales aprenden técnicas de supervivencia.
Durante tres días, y a 3.800 metros de altura, los jóvenes fueron capacitados por cinco comandos pertenecientes a la VI División de Ejército en supervivencia, superación de obstáculos, orientación y primeros auxilios, entre otros, donde se les impusieron diversos desafíos en lo cuales las principales barreras estuvieron dadas por la naturaleza, condiciones geográficas y climáticas que ofrece la zona, ubicada a más de 200 kilómetros al interior de Iquique.
El teniente Hernán Oyanguren, de la Compañía de Comandos de la Segunda Brigada Acorazada, indicó que los estudiantes adquieren una experiencia incomparable en este desafío. "Hemos participado con gusto en este proyecto. A 3.800 metros hemos entregado a los alumnos clases teóricas para que tomen conciencia del peligro, cómo enfrentarlo y primeros auxilios, les enseñamos técnicas de orientación y supervivencia, que las pueden ocupar en cualquier momento. Ha sido una iniciativa tremendamente enriquecedora, principalmente por el nivel de interés de los alumnos, los ejercicios que hemos desarrollado y el intercambio de experiencias".
El alumno Sebastián Varas, del Colegio Deportivo de Iquique, dijo que la participación en el proyecto será inolvidable: "Es una bonita experiencia, nos han enseñado a armar refugios, supervivencia, qué hacer si nos perdemos en el desierto, los puntos cardinales, conocer lo que nos revelan las condiciones climáticas. Creo que son jornadas donde deben integrarse alumnos de más colegios".
La profesora María Estela Araya sostuvo que este tipo de actividades son una contribución al desarrollo de los alumnos: "Es una experiencia única y maravillosa, han podido convivir con la naturaleza y muchos de ellos conocer un paisaje impresionante".
Durante los días de permanencia en el altiplano, los alumnos tuvieron la opción de conocer el Santuario de la Naturaleza, su flora y fauna. Además del salar del Huasco, los alumnos realizaron ejercicios de simulación en Collacagua, Lirima y la quebrada del Diablo, siendo ésta última donde ejecutaron extensas caminatas y aplicaron las técnicas de supervivencia que les enseñaron los comandos.
Esta es la cuarta expedición que realizan los estudiantes hasta el salar durante el año, y la primera en que se integra el Ejército.