Una comandante de las Unidades de Protección de las Mujeres Kurdas perpetró un ataque suicida en un inento por obstaculizar el avance del Estado Islámico (EI) hacia la ciudad de Kobane, reporta hoy la agencia kurda Hawar News.

El director de la Unión de Medios Libres, Mustafa Bali, informó a dpa que la combatiente, llamada Arin Mirkan, detonó un artefacto explosivo cuando las filas yihadistas del EI intantaban avanzar sobre posiciones kurdas en una estratégica colina cercana a Kobane.

El EI intenta tomar el control de la ciudad, una localidad kurda que se encuentra en el norte de Siria y en las proximidades de la frontera con Turquía. El EI es resistido fuertemente por las Unidades de Protección Kurdas (YPG) con el respaldo por aire de Estados Unidos y aliados árabes.

La caída de Kobane - la más pequeña de las tres regiones autónomas kurdas creada el año pasado por el Partido de la Unión Democrática (PYD) kurdo y sus aliados- daría al EI el control de una gran parte de la frontera siria con Turquía. 

Las filas del grupo Estado Islámico (EI) recabaron hoy refuerzos en bastiones como Al Rakka o Deir as Saur para avanzar en su intento por tomar la ciudad siria, mientras que desde Pakistán los talibanes expresaron su respaldo a las fuerzas terroristas que luchan en Siria e Irak. 

Pese a los bombardeos aéreos lanzados en la zona por los estadounidenses y sus aliados árabes, los terroristas del EI lograron hacerse con la parte sur de una estratégica colina cercana a Kobane, mientras que la región norte de esa misma colina está en manos de las Unidades de Protección Popular (YPG) kurdas. 

Los combatientes kurdos aseguraron hoy haber librado combates "cuerpo a cuerpo" con los yihadistas en la estratégica colina, pero advirtieron que el EI recabó respaldos, informa la agencia Firat.

Aviones de combate estadounidenses y sus aliados árabes lanzaron siete ataques aéreos para defender la ciudad cercana a la frontera turca, en una jornada en la que el Observatorio sirio de Derechos Humanos reportó 27 muertos.

Los yihadistas ya han conquistado más de 300 localidades en las inmediaciones de Kobane. Según el gobierno turco, dicho avance provocó la huida a Turquía de más de 160.000 personas, sobre todo sirios kurdos.

El combate por las zonas estratégicas recibió hoy indirectamente el respaldo de las filas talibanes en Pakistán.

"Los muyaidines que luchan en Irak y Siria son nuestros hermanos", señaló en un comunicado el líder de los talibanes de Pakistán (TTP), el mulá Fazlulá. "Os ayudaremos de todas las maneras que sean posibles", añadió. 

El comunicado no menciona expresamente a la milicia EI, pero un portavoz de los TTP confirmó a dpa que la declaración de apoyo es válida tanto para EI como para todos los "grupos islámicos" en la región.

Fazlulá instó a los distintos grupos extremistas de Siria e Irak a unirse y declaró que todo el que lucha contra los no musulmanes merece respeto.

Los TTP han estado tradicionalmente asociados a Al Qaeda, que al igual que EI se adscribe el liderazgo en la yihad global. El comunicado no aclara cómo será el apoyo que brindarán los talibanes a la milicia terrorista. En Irak, en tanto, el EI volvió a atacar hoy la mayor refinería de petróleo del país, en Biyi. Tras varias horas de combates, el Ejército iraquí logró expulsar a los extremistas, informaron las Fuerzas de Seguridad.

Situado a unos 200 kilómetros al norte de Bagdad, Biyi es un enclave disputado desde hace meses. En junio los extremistas tomaron brevemente la refinería, que fue recuperada poco después por el Ejército. Desde entonces, EI ha atacado en varias ocasiones Biyi, donde también se encuentra la central eléctrica que abastece a Bagdad.

Medios sensacionalistas alemanes aseguran en su publicación de hoy que la amenaza que representa el EI no se ciñe a los territorios sirio e iraquí. Según el periódico "Bild am Sonntag", la milicia intenta enviar a Europa comandos terroristas camuflados como refugiados.