La actriz australiana Nicole Kidman y su marido, el cantante de música country Keith Urban, desataron una ola de indignación en Australia al referirse a la madre de alquiler de su segunda hija como "máquina incubadora" ("gestational carrier"), informan medios locales.
"Con esas palabras se le está privando de cualquier humanidad a la mujer cuyo cuerpo albergó durante nueve meses al bebé", critica el diario The Australian en su edición de ayer.
El tema dio también pie a acalorados debates en tertulias radiofónicas. Kidman y Urban no salieron bien parados de la polémica. La pareja empleó el controvertido término en el comunicado oficial a los medios internacionales.
Los dichos de Kidman aumentaron la apatía de los australianos, quienes la critican por vivir con su familia en Estados Unidos. Cuando nació la primera hija del matrimonio, Sunday Rose, en 2008, fue cuestionada por el nombre que escogió para la niña por considerar que sonaba a "Sunday Roast" (asado de domingo).
Los australianos se preguntan además si Kidman y Urban han atentado contra la ley, en vista de que en el estado de Nueva Gales del sur, de donde procede la estrella del cine, próximamente entrará en vigor una norma que impide a los nativos en el extranjero pagar dinero a madres de alquiler.
No se sabe, sin embargo, a qué acuerdo han llegado Kidman y Urban con la mujer que gestó a su bebé.
En tanto, una portavoz aseguró que Kidman no tiene nada que temer porque aún la ley no ha entrado en vigor y no es retroactiva.