Ayer comenzó en diferentes medios de comunicación la campaña de fomento de la lectura Leo 2009, proyecto que busca fortalecer el hábito de la lectura en diferentes momentos e instancias como la calle, los diarios, el baño, o el colegio.
 
La difusión del Plan Nacional de Fomento de la Lectura tiene por objetivo estimular el hábito de leer en el más amplio sentido, llegando a la mayor cantidad de audiencias, y con especial énfasis en los niños y jóvenes.
 
La Ministra de Cultura, Paulina Urrutia indicó que la formación del hábito lector requiere de una primera etapa de animación a la lectura, de profunda motivación que convoca a la participación de todos como proyecto país y que debe incluir a todos los actores involucrados: autores, editores, medios de comunicación, organizaciones sociales, profesores, colegios, estudiantes, bibliotecas, universidades, ministerios, municipalidades, entidades privadas, entre muchos otros.
 
La Campaña se desarrollará a través de la producción de diversos soportes comunicacionales que incluye presencia en espacios en vía pública, buses urbanos de Transantiago, spots de televisión, frases radiales a nivel nacional y material en prensa escrita. Además, se recurrirá a la instalación de gráfica de campaña en espacio interior en vagones de Metro de Santiago y la distribución de 10.000 afiches a todas las regiones del país, a través de los Consejos Regionales de Cultura.
 
El Consejo Nacional de la Cultura y las Artes establece como prioritario el fomento de la lectura. Y bajo esa premisa "estamos desarrollando una campaña publicitaria masiva, a nivel nacional que permita posicionar la lectura como un tema amplio y transversal por su pertinencia, implicancias y beneficios", señaló Urrutia.
 
Hoy en día, existe una serie de temas asociados a la falta de lectura por parte de los chilenos, como lo es la escasez de libros en muchos hogares. Sin embargo, entre las principales razones esgrimidas para no leer está la falta de tiempo (26%) y de interés (47,3%).  Es decir, para más del 70% de los no lectores, se trata de desmotivación, asociada a obligatoriedad (lectura obligatoria), siendo que en realidad la lectura es una invitación a conocer, compartir y construir mundos. 
 
Por lo mismo, destacó esta etapa de implementación con publicaciones de ediciones populares, la puesta en marcha del Programa Nacidos para Leer y una esta campaña comunicacional a nivel público para toda la ciudadanía.