En Chile existen 21 millones de teléfonos celulares, de los cuales 341 mil fueron sustraídos sólo en 2010. Debido a esto, la subsecretaría de Prevención del Delito en conjunto con las compañías Entel, Movistar y Claro, lanzaron una campaña que busca promover el bloqueo tanto del aparato como de la tarjeta SIM, lo que en un largo plazo busca reducir el robo de los aparatos, ya que al ser bloqueados no podrán volver a usarse.

Para hacer efectivo el bloqueo se debe llamar a la compañía que entrega el servicio y pedirlo. Desde la subsecretaría de Prevención del Delito señalan que no hay un número único para hacerlo, pero que existe un decreto que obliga a la compañía a bloquear tanto la tarjeta SIM como el aparato a través del IMEI, que es un número único de identificación que tienen todos los celulares.

Para obtener el número IMEI, se debe marcar *#06# (esta combinación funciona en la mayoría de los equipos) y aparecerá el código que hay que entregar para realizar el bloqueo del aparato.

Una vez producido el bloqueo, el celular queda inmediatamente inhabilitado para realizar llamados, incluso si se le cambia la tarjeta SIM, por lo que se espera que de esta forma, los delincuentes desistan de robar los aparatos, ya que pierden toda utilidad tal como se da a entender en la campaña publicitaria.

En tanto, para volver a habilitar el aparato y el número telefónico, que con la portabilidad numérica pertenece a las personas, se necesitará una orden explícita del dueño del contrato.

El subsecretario de Prevención del Delito, Cristóbal Lira, llamó además a no comprar teléfonos robados, porque además de adquirir un aparato inútil, se es cómplice de un delito.

"Es importante que las personas tomen medidas de auto cuidado para evitar situaciones que incentiven el robo de su aparto celular. Entre ellas, hacer un uso responsable del teléfono en vía pública, no hablar cuando se esté manejando o caminando por la calle, entre otros", indicó Lira.