En su búsqueda de vida en el cosmos, los científicos hallaron más de 300 planetas fuera de nuestro sistema solar, pero todos fueron globos de gas o se ha comprobado que no eran sólidos. Ahora, un grupo de astrónomos europeos demostró la existencia de un planeta extrasolar rocoso, transformándolo en lo más parecido a La Tierra que se haya descubierto hasta ahora.
El exoplaneta denominado "CoRoT-7b" se encuentra a 500 años luz y tiene la misma densidad que la Tierra, informó hoy la Organización Europea para la Investigación Astronómica en el Hemisferio Austral (ESO), en la ciudad alemana de Garching, cerca de Múnich.
Sin embargo, el CoRoT-7b tiene temperaturas muy altas, debido a que está demasiado cerca de su sol como para permitir la vida como se conoce en La Tierra.
"Básicamente nosotros vivimos sobre una roca", dijo uno de los descubridores, Artie Hatzes, director del observatorio Thuringer en Alemania. "Es lo más parecido a La Tierra que hemos hallado hasta ahora, pero está demasiado cerca de su sol".
Está tan cerca, que la temperatura en la superficie supera los 1.980 grados centígrados, demasiado como para permitir la vida. Orbita su estrella en sólo 20 horas a una velocidad de 750.000 kilómetros por hora. En comparación, Mercurio -el planeta más cercano al Sol- completa su órbita solar en 88 días.
Para obtener estas mediciones, los astrónomos utilizan lo que ellos llamaron "el mejor dispositivo de caza de exoplanetas en el mundo", que es un espectrógrafo HARPS acoplado al telescopio del Observatorio Europeo en La Silla, Chile.
El hallazgo fue publicado en la revista Astronomy and Astrophysics.
COROT-7B
Al planeta, descubierto este año, le dieron el nombre Corot-7b. Los científicos europeos lo observaron numerosas veces para medir su densidad y comprobar que era rocoso como La Tierra.
En nuestro sistema solar sólo cuatro planetas son rocosos: Mercurio, Venus, La Tierra y Marte.
Asimismo, el tamaño de Corot-7b es el más aproximado a La Tierra en comparación con casi todos los demás planetas hallados fuera de nuestro sistema solar. Su radio es apenas una vez y media el de La Tierra, con una masa unas cinco veces mayor.
Ahora que se ha hallado otro planeta rocoso tan cerca de su propia estrella, se renovaron las esperanzas de los científicos de hallar más planetas similares a La Tierra más lejos, donde las condiciones puedan ser más favorables para la vida, dijo Alan Boss del Instituto Carnegie.