Una denuncia por el delito de amenazas interpuso ayer la Comunidad Judía de Chile en la Fiscalía Regional Metropolitana Oriente, a raíz de la "situación de violencia" ocurrida durante un partido de la "Superliga" de fútbol amateur, que enfrentó a un equipo de esa comunidad contra el Club Palestino, y que fue realizado en el Estadio Palestino, ubicado en la comuna de Las Condes.
Según la denuncia, dirigida "contra todos quienes resulten responsables", los hechos ocurrieron el día jueves 8 de junio y según consigna el escrito, durante el evento deportivo, "devino en un preparado y premeditado intento de un grupo cercano a 200 personas por agredir a los deportistas del Estadio Israelita Maccabi (EIM), siendo estos no solo objeto de cánticos e insultos racistas y xenófobos, sino que de violentas amenazas y agresiones que pusieron en serio riesgo su integridad física".
Además, el documento señala que "los seguidores del equipo del Estadio Palestino fueron convocados por redes sociales con el propósito de hostilizar al equipo del Estadio Israelita".
Entre los antecedentes entregados al fiscal regional Manuel Guerra, se relatan de manera textual los cánticos y dichos que fueron catalogados como "antisemitas" por el presidente de la entidad judía, Shai Agosin. "En un partido de este tipo nunca hay público y aquí habían más de 150 personas con alcohol en la mano, con bengalas y una actitud tremendamente agresiva, con gritos xenófobos y antisemitas, e incluso con golpes hacia los jugadores y hacia el árbitro", afirmó. Asimismo, agregó que "hay que tratar de erradicar esta escalada de violencia y no importar el conflicto que existe en Medio Oriente".
Además, la denuncia se acompaña del informe del árbitro del partido, donde se describen parte de los incidentes.
A través de un comunicado, el Club Palestino manifestó que "los incidentes ocurridos no reflejan nuestros valores como club, por ello se ha llevado a cabo un sumario interno para aplicar las medidas disciplinarias correspondientes a los socios que se vieron involucrados". Asimismo, agregan que "el revuelo público y extradeportivo que se ha generado a raíz de este partido de fútbol no refleja la realidad de las ligas interclubes de Chile, en las que cuando ocurre algún tipo de incidente de indisciplina, estos se resuelven en la cancha o bien a través del tribunal de disciplina".
Finalmente, el club dice "lamentar" "la injerencia y presión que ha ejercido la Comunidad judía (...) Se ha intentado sacarle provecho político a esta situación a través de los medios de comunicación y redes sociales, difundiendo un relato de los hechos que escapa totalmente a la realidad".
También informaron de la aparición de "rayados xenófobos y racistas" en el exterior de las dependencias del Estadio Palestino.
El fiscal Manuel Guerra, en tanto, dijo que "vamos a desarrollar las acciones tendientes a determinar quiénes están detrás de estos hechos (...) No queremos que esto sea una escala que haga que dos comunidades que han vivido en paz y han contribuido al progreso de país vivan divididas".