Con 101 votos a favor, la Cámara de Diputados aprobó la Ley Emilia, lo que permite su paso al Senado en segundo trámite constitucional.
La iniciativa modifica la Ley de Tránsito, indicando que en el caso de lesiones graves o muerte de una o más personas, se impondrán las penas de presidio mayor en su grado mínimo (5 años y un día a 10 años) y multa de 20 a 50 UTM, además de la pena de inhabilidad perpetua para conducir vehículos de tracción mecánica.
Asimismo, se elimina para estas personas el derecho a acceder a beneficios penitenciarios como salidas dominicales, reducción de pena por buena conducta y libertad condicional, de manera que la pena se cumpla en su totalidad en la cárcel.
Esta iniciativa, informada a la Sala por el diputado Gustavo Hasbún (UDI), de la Comisión de Transporte, es la segunda en este sentido que se presenta, luego que el Congreso no llegara a acuerdo en el proyecto anterior respecto a las penas que se imponían.
El caso que originó el nombre con que se conoce al proyecto, es el de la menor Emilia Silva, quien falleció a los 9 meses producto del choque que recibió el vehículo en que viajaba junto a sus padres, accidente causado por un conductor en estado de ebriedad.