Con tres comuneros detenidos, empujones, altercados con la prensa y efectivos de Gendarmería terminó la audiencia de preparación de juicio oral en contra de 12 comuneros mapuches por el atentado al Fundo San Leandro, en Lautaro.

Se trata de la preparación del juicio por infracción a la Ley Antiterrorista y los delitos de violación de morada, amenazas, homicidio simple frustrado reiterado, robo con violencia, tenencia ilegal de arma y municiones y hurto, entre otros, donde hay doce acusados, entre ellos los líderes militares de la Coodinadora Arauco Malleco, Luis Tralcal y Miguel Tapia, para quienes el fiscal, Sergio Moya, pide penas de hasta 15 años de presidio.

Los problemas comenzaron cuando los imputados Eliseo Ñirripil y Elvis Millán se pararon de sus asientos reclamando que no aceptaban las defensas que los patrocinaban, entre ellos el abogado Pablo Ortega, ni menos a Jaime López, el nuevo abogado que por turno les había asignado la magistrado, Aydee Roa.

La negativa subió de tono cuando los doce mapuches imputados se pararon anunciando el inicio de una huelga de hambre seca y que se oponían a la realización de la audiencia, lo que derivó en la solidaridad de familiares que estaban en la sala, generándose un altercado general con los gendarmes.

A la luz de los incidentes, la magistrado ordenó el desalojo de la sala, lo que aumentó la tensión provocando los empujones.

Hubo tres detenidos que pasarán a la justicia por el delito de alterar el orden en las audiencias, mientras que la magistrado fijó para las 9.00 del lunes el reinicio de la jornada judicial.