Como una "pérdida sin precedentes para Sudáfrica", calificó ayer el Presidente de ese país, Jacob Zuma, la reciente muerte del ex Mandatario y premio Nobel de la Paz 1993, Nelson Mandela. El gobernante expresó estas palabras durante un servicio religioso realizado ayer en una iglesia metodista ubicada en Bryston, un suburbio de Johannesburgo, que formó parte del "Día de la Oración y la Reflexión" convocado para rendir un homenaje al líder de la lucha contra la segregación racial, quien falleció el jueves pasado a los 95 años.
"Es importante no olvidar algunos de los valores que defendió y por los que sacrificó su vida", recalcó Zuma, quien en la ceremonia estuvo acompañado de Winnie Madikizela-Mandela, la segunda ex esposa de Madiba, y de su nieto Mandla Mandela, según consignó la agencia Dpa. Al igual que en Johannersburgo, en todo el país se celebraron en paralelo diversas ceremonias religiosas para honrar a Mandela. Se trató, además, del puntapié inicial a una serie de actividades que se desarrollarán durante esta semana, y que culminarán el próximo domingo con el entierro de Madiba, el cual tendrá lugar en Qunu, donde pasó su infancia. Los rezos por Mandela también fueron replicados en diversas latitudes del mundo, como Cisjordania y Londres, donde el arzobispo de Canterbury, Justin Welby, destacó "el coraje" y "la humanidad" del ex Presidente sudafricano.
A sus exequias se espera que concurran cerca de 90 mil personas, entre ellas alrededor de 60 jefes de Estado y de gobierno, de acuerdo a lo informado ayer por la ministra sudafricana de Relaciones Exteriores, Maite Nkoana-Mashaban. No obstante, la lista de mandatarios todavía no está cerrada y podría incrementarse en los próximos días. Al respecto, el ministro de la Presidencia sudafricano, Collins Chabane, estimó ayer que "el hecho de que líderes internacionales vayan a viajar con tan poco margen de tiempo refleja el lugar especial que Nelson Mandela ocupa en los corazones de la gente en todo el mundo", según consignó la agencia EFE.
Uno de los eventos de despedida que más expectación han generado tendrá lugar mañana en el estadio FNB. En respuesta al gran interés por asistir, el gobierno sudafricano anunció que se habilitarán en Johannesburgo otros tres estadios con pantalla gigante para que quienes que no logren ingresar al FNB, puedan observar el tributo a Mandela en directo.