Para dar continuidad a un proyecto piloto que hace un par de años inició el gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, el director nacional de Conadi, Jorge Retamal oficializó el relanzamiento con características de permanente a la iniciativa que permite a machis (médicos) mapuches acceder a una vivienda con pertinencia arquitectónica cultural para ejercer su actividad sanadora.

Se trata de un proyecto que esta vez beneficia a 14 pertenecientes a distintas comunidades mapuches de las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Chol Chol, Nueva Imperial, Gorbea y Freire, cuya inversión total llega a los 209 millones de pesos.

El director de Conadi, explicó que "con esto ponemos valor a todo nuestro pueblo mapuche, en todas las dimensiones de políticas indígenas, tanto en lo que dice relación con las tierras, acompañamiento productivo y por supuesto la cultura y sus tradiciones".

Al ser consultado sobre cuál era el diferencial con otras iniciativas, precisó que "lo importante es que lo dejemos como política y no es sólo una vez, partimos este años pero lo vamos a seguir replicando", y que lo importante es que "hemos recogido lo mejor de la experiencia y esto se transforma en política pública".

Sobre el particular, la alcaldesa de Chol Chol, Violeta Cea, explicó que "es cierto que en nuestra comuna hace como dos años se entregó vivienda a una machi, pero ahora la diferencia es que el programa va a tener continuidad porque en esa oportunidad no todos los machis recibieron y ahora hay más".

Una de las beneficiadas, Viviana Picunche, de sólo 20 años de edad, explicó que "yo estoy aprendiendo y esto me ayuda mucha para sanar a la gente con la sabiduría que me entrega Chao Ngnechen (Dios)", mientras que Abraham Lincopán destacó que "esto es un sueño porque así vamos a poder atender mejor a nuestros peñis y en un lugar más cómodo para todos".

Las nuevas viviendas tienen dos dependencias destinadas a dormitorios familiares, un dormitorio para el paciente y su acompañante, baño, cocina, y una dependencia amplia para la participación comunitaria en rogativas especiales para la sanación de un enfermo en particular.

En total son setenta metros cuadrados, a base de madera y con piso mixto entre madera de tablones y cerámica.