Hoy la Corporación Nacional Forestal (Conaf) realizó, ante el Primer Juzgado de Letras de Arica, la formalización de la denuncia hecha contra la Empresa Quiborax y/o la Cía. Minera Ñandú, por la ejecución de labores mineras en el Salar de Surire sin las autorizaciones requeridas.
La solicitud de Conaf a tribunales apunta primero a que se decrete de inmediato la suspensión provisional, así como a un pronunciamiento definitivo sobre las labores que actualmente se están ejecutando en el Monumento Natural, por parte de la minera.
De acuerdo a las normativas expuestas, Quiborax estaría impedida de ejecutar labores mineras en el Monumento Natural Salar de Surire, mientras no cuente con un permiso de la Presidenta de la República. Asimismo, de acuerdo a las presentaciones de Conaf, la empresa estaría impedida para las faenas, mientras no acredite que han sido otorgados los permisos ambientales establecidos en la Ley Nº 19.300, de Bases del Medio Ambiente.
La presentación de Conaf ante el Primer Juzgado de Letras incluye también un Primer Otrosí, por el cual solicita oficiar a la Comisión Regional del Medio Ambiente de Arica y Parinacota, para que emita un pronunciamiento sobre la obligatoriedad de realizar un estudio de impacto ambiental, previo a ejecutar actividades mineras en el Monumento Natural.
Por su parte el director regional de Conaf, Jorge Torres, enfatizó que "la denuncia dice relación con un sector puntual, y no con la totalidad de la explotación que mantiene Quiborax. Se trata de un sector específico que no está cumpliendo con la normativa vigente, y que atenta contra la legislación ambiental que nos rige", indicó.
MONUMENTO NATURAL
La parte oriental del Salar de Surire, de 11.298 hectáreas, fue declarada Monumento Natural en 1983, con el fin de preservar su valiosa fauna compuesta principalmente por camélidos, ñandúes y flamencos.
Esta área protegida abarca zonas de salares y ecosistemas de altura y se encuentra ubicada en la comuna de Putre, Provincia de Parinacota.