"Pensábamos que era porque habíamos dado el agua". Con esta frase el concejal "rebelde" de Chaitén, Bernardo Riquelme, graficó la impresión que se apoderó de los chaiteninos cuando advirtieron el fuerte contingente policial que llegó ayer a la devastada zona de la Región de Los Lagos.

El grupo arribaba con una misión secreta, muy distinta: resguardar la estadía de la Presidenta Michelle Bachelet en Santa Bárbara, lugar donde se levantará la Nueva Chaitén luego que su antecesora fuera destruida por la erupción del volcán del mismo nombre.

"Ayer llegó un destacamento de Fuerzas Especiales a la zona, los que se apostaron en la salida de Chaitén hacia el norte, para que ningún chaitenino pueda acercarse a la Presidenta, y cortando la carretera en un sector donde la tranquilidad es máxima, y por la cual queremos vivir en esta zona", expresó Riquelme a latercera.com.

Según explicó el concejal, cuando se percataron de la llegada del fuerte contingente policial a Chaitén "pensábamos que era porque habíamos dado el agua o (porque venían) a cuidar las cañerías. Lo encontrábamos raro, pero hoy sabemos porqué es".

El representante comunal aseguró que el operativo de carabineros desplegado en la zona "está bueno para otro tipo de zonas, como Honduras, Afganistán, Irak".

Riquelme valoró la visita de la Mandataria a "santa barbaridad" como él llama a la zona, pero lamentó el despliegue de FFEE.

"Me parece bien que venga a mirar esta parte de Chile. Lo malo es que no se permite que la gente converse con ella, o por lo menos pueda acercarse a la gente y así la gente poder expresarle su sentimiento", manifestó.