Los rescatistas turcos recuperaron el  sábado los cuerpos de dos mineros del fondo de la mina de Soma, con lo que  dieron por concluidos sus trabajos, con un saldo definitivo de 301 víctimas  mortales, anunció el ministro de Energía, Taner Yildiz. 

"La misión de rescate concluyó. No queda ningún minero en el fondo de la mina", declaró Yildiz a la prensa, cuatro días después de la explosión que devastó el yacimiento.

Un nuevo incendio se había declarado el sábado en la mina devastada, lo que retrasó el fin de las operaciones para recuperar los cuerpos. 

El accidente de Soma provocó desde el martes una gran emoción en todo el  país y una oleada de manifestaciones contra el gobierno islamista conservador  del primer ministro Recep Tayyip Erdogan, acusado de negligencia.

La policía turca dispersó violentamente el viernes con cañones de agua y  gases lacrimógenos a unas 10.000 personas que manifestaron en Soma para  denunciar las condiciones de trabajo de los mineros.