Un ex soldado estadounidense fue condenado hoy a cadena perpetua por violar y matar a una adolescente iraquí, así como asesinar a toda su familia para no dejar rastros de su accionar, en un hecho ocurrido en febrero de 2006 en Mahmudiya, 30 kilómetros de Bagdad.
Steven Green, quien había sido expulsado del ejército antes de ser incriminado, fue condenado por un tribunal civil del estado norteamericano de Kentucky.
En mayo evitó la pena de muerte cuando el jurado, después de horas de discusión, no logró condenarlo por unanimidad a la pena capital.